Para Balancán, Roxana Trees

Juan Ochoa Vidal
Twitter: @JOchoaVidal
Esta semana, el partido en el poder lanzará su convocatoria para precandidaturas a alcaldías. Cada municipio tiene sus particularidades. Balancán, por ejemplo, es muy distinto a los otros. De entrada, ya tuvo gobiernos emanados de cuatro partidos: PRI, PRD, PAN y ahora MORENA.

El oposicionismo tendrá varios candidatos. Los morenistas, por su parte, merecen un rostro, un perfil diferente. Y hay una mujer joven, poseedora de formación académica adecuada, experiencia en la administración pública y con buena fama pública, que tiene todo para triunfar en las elecciones del 6 de junio: Roxana Trees Farías.

Licenciada en administración, con maestría en dirección de empresas, a sus 35 años no arrastra negativos y en cambio sí muy buena aceptación entre los potenciales votantes, tanto de la cabecera municipal como de la extensa zona rural y sus poblados.

Esposa y madre de tres niños, en definitiva no es un “cartucho quemado”: representa la alternativa de cambio, de transformación que enarbola MORENA.

Hasta hace pocas semanas se desempeñó como directora de Desarrollo del ayuntamiento. Esta balancanense ha sido, a la par de su sólida formación académica y su cercanía con la gente humilde, mujer empresaria de familia dedicada a la producción agrícola de papaya y guanábana.

Previamente trabajó en la gestión de proyectos para el desarrollo empresarial del municipio y estados vecinos de Chiapas y Campeche.

En la búsqueda de perfiles y luego de hacer un sondeo en el municipio, encontramos en internet, por ejemplo, que a inicios de septiembre 2016 impartió en el Instituto Tecnológico Superior de los Ríos el curso taller intitulado Formación de Facilitadores del Modelo Talento Emprendedor, a 24 catedráticos de esa institución.

Ello, con el propósito de que a su vez los catedráticos pudiesen compartir ese conocimiento con sus estudiantes a fin de que las nuevas generaciones tengan acceso a esta importante competencia con vertientes en la generación de emprendedores innovadores.

Como se puede apreciar, la maestra Trees Farías no es simplemente una “grilla” o “chapulín” que anda buscando acomodo político. Representa, a no dudarlo, a la nueva generación de jóvenes de Balancán que se han formado con la determinación de ser útiles a la sociedad de la cual son parte y que los conoce desde su niñez.
 
A todas luces llena el perfil que requieren los nuevos tiempos, para que Balancán pueda salir adelante ante las actuales dificultades, en una coyuntura agravada por los efectos devastadores de la pandemia, así como por el abandono y corrupción que hasta no hace mucho tiempo le causaron mucho daño a ese municipio y a todo México.

Ojalá en todos los municipios de Tabasco los partidos pudieren encontrar a personas como Roxana Trees Farías, cuya trayectoria la avala y da testimonio de que no es necesario reciclar politiquillos.

En vez de eso se puede darles oportunidad a mujeres y hombres, algunos jóvenes como es este el caso y otros de mayor edad, pero que han cimentado su vida con honradez y presentando buenos resultados en sus encomiendas anteriores.

El más reciente desempeño que tuvo la maestra Farías, así como sus experiencias laborales anteriores, permiten identificar que tiene cercanía con la gente; conoce los problemas del municipio y tiene un claro diagnóstico con respecto a qué hay que hacer a partir del 5 de octubre.

Resulta ser muy afortunado encontrar un perfil como este, en momentos en que todos los partidos, en los 17 municipios de Tabasco, tienen dificultades para cubrir los lineamientos en materia de igualdad de género. ¿En cuántos otros podrán los institutos políticos, en este caso específico MORENA, encontrar a un cuadro femenino competitivo y bien formado?

Por lo que pudimos observar en la revisión que hicimos en redes sociales y también mediante el sondeo entre las no pocas personas que conocemos en Balancán, Roxana Trees Farías es además una persona de esas que no se desviven por el protagonismo y el anhelo vano de ser admiradas y reconocidas.

Durante su gestión como directora de Desarrollo hizo bien su trabajo. Demostró lealtad institucional. Es una militante convencida de MORENA. No es conflictiva. Sabe tratar a sus semejantes. Es honorable. Cumple su palabra.

Tampoco es de esas personas que se involucran en tareas partidistas para ver qué provecho sacan y hacen berrinches cuando no obtienen lo que ambicionan.

Está en manos de su partido tomar la decisión adecuada o correr riesgos innecesarios.