La 4T: viene la prueba de fuego

Juan Ochoa Vidal
Twitter: @JOchoaVidal
Al interior de MORENA existen dos visiones en cuanto a lo que sucederá en las elecciones locales del 6 de junio: una, que el liderazgo de Andrés López Obrador y los apoyos sociales serán más que suficientes para repetir el fenómeno de 2018; dos, que con o sin la simpatía hacia el Presidente de la República mayorías ciudadanas emitan votos de rechazo y, por lo menos, ese partido pierda muchos espacios.

Desde la oposición, así como desde la óptica de personas con las cuales hemos platicado y que no están casados con ningún alineamiento partidista o personaje, o que cuestionan al partido en el poder por sus resultados, prevalece el segundo criterio. Incluso hay quien cree que se impondrá el voto de castigo aunque los demás partidos nominen a malos candidatos o cartuchos quemados.

De cualquier manera, para afianzarse en el poder y poder avanzar con fuerza hacia 2024 en un 2021 que se ve muy complicado en todos los aspectos, el partido gobernante requiere ganar mayoría en el Congreso del Estado, del mismo modo en que en las cámaras federales, y volver a quedarse con municipios claves: Centro, Macuspana, Huimanguillo, Comalcalco, Cárdenas y Nacajuca, ¡mínimo!
Tan solo en Centro están en juego siete de las 21 diputaciones. Allí y en los demás municipios, tomar decisiones preelectorales con exceso de confianza, pensando en que el aparato puede sacar adelante a cualquier candidato como en 2018, constituye una percepción de altísimo riesgo para ese instituto político y, eventualmente, resultará ser ventajosa para las oposiciones.

Con dos ex aspirantes que optaron por inscribirse en busca de diputaciones federales, en Centro solo quedan dos prospectos: Jesús Alí de la Torre y Yolanda Osuna Huerta.

El primero es político con oficio y cuenta con estructura propia. Carente de experiencia electoral, la segunda es, desde la percepción entre la clase política, la de la línea y ha trascendido que le están armando un equipo de trabajo. Pronto, MORENA definirá el género para el municipio que congrega a cerca del 34 por ciento de los votantes de todo Tabasco y para los otros 16.

En otros estados, la selección de candidatos al interior del partido del Presidente ha dado paso a pleitos y abiertas rupturas. Eso no sucederá aquí, siempre y cuando las cosas se manejen con sentido común y buen cálculo político, bajo el entendido de que estas elecciones intermedias serán, por mucho, distintas a las de hace casi tres años.

A continuación, las fechas legales para el proceso electoral en Tabasco:
Precampañas, del 2 al 31 de enero. Presentación de informes, 1 al 10 de febrero. Retiro de propaganda, 1 de febrero al 2 de abril. Registro de candidaturas: 6-15 de abril. Campañas, 19 de abril a 2 de junio. Cese de la difusión de publicidad gubernamental, 19 abril a 6 junio.
Candidaturas independientes. Presentaron su carta de intención y están recolectando firmas de apoyo, aspirantes únicos a presidentes en cuatro municipios: Sergio Vidal González, en Comalcalco, quien hasta el sábado registró 967 firmas ciudadanas del total de 3,058 que necesita; Jesús Abraham Cano González, de Cunduacán, con la abrumadora cifra de 18,012 firmas cuando necesita solo 1,888, lo que a todas luces lo sitúa como altamente competitivo.

Los otros dos son: Fernando Cadenas Zamora, de Huimanguillo, quien ha juntado 685 firmas de las 2,628 que se le piden como mínimo; y Donald Jiménez Montejo, de Tenosique, quien con mil 202 por lo pronto ya rebasó las 884 mínimas. El plazo para tal efecto vence el 31 de enero.
Los topes de gastos para obtener el apoyo ciudadano para esos candidatos independientes son: Comalcalco 144,353.08; Cunduacán 89,478.47; Huimanguillo 124, 662.12 y Tenosique 41, 203.53 pesos.

Con un listado nominal de un millón 711 mil 129 ciudadanos, el seis de junio se decidirá si se modifica la geografía política de Tabasco, en momentos en que la administración estatal ya superó la tercera parte de su periodo constitucional y los ayuntamientos cuentan con solo unos cuatro meses para iniciar el cierre de su gestión.

En esas elecciones se definirán 21 diputaciones de mayoría y 14 de representación proporcional, así como 17 presidencias municipales, 17 sindicaturas y 51 regidurías. Pero, más que eso, independientemente de lo que digan las publicitadas encuestas, se medirán los alcances de la 4T.