Cubrir lo básico o pagarle a CFE

Juan Ochoa Vidal
juanochoavidal@gmail.com
Cuando el actual Presidente de la República llamó a no pagar consumos de energía eléctrica, ni agua ni predial, a inicios de 1995, los usuarios de esos servicios que enseguida atendieron a esa convocatoria estuvieron motivados por la protesta en contra de lo que se calificó como fraude electoral de Roberto Madrazo Pintado.

En los años y décadas siguientes, se sumaron más y más militantes o simpatizantes de Andrés López Obrador, así como simples morosos; pero en tiempos más recientes, en la medida en que se profundizó gradual y frenéticamente la crisis económica de Tabasco, han venido agregándose también jefes de familia que tuvieron que optar entre llevar comida a su hogar o escabullirse de acreedores.

En el caso de CFE, hay usuarios de todas las condiciones socioeconómicas que son muy cumplidos en sus pagos, aunque entre estos últimos un número desconocido roba electricidad: utilizan varios aparatos de aire acondicionado y pagan 800 pesos bimestrales, por ejemplo.

En esa empresa ha existido una escandalosa corrupción, de arriba a abajo, que se tradujo en dinero a la mano para el trabajador y hasta superintendentes, a cambio de hacerse de la vista gorda y vender así una especie de contrato de protección tanto a usuarios domésticos como a grandes consumidores que son propietarios de hoteles, comercios o restaurantes.

El primero de junio pasado entró en vigor un buen programa implementado por CFE y el gobierno de Tabasco, que implica borrón y cuenta nueva, previa recontratación del servicio. En principio, muchísima gente acudió a regularizarse. En el último mes las enormes colas para obtener ficha para atención a clientes se redujo significativamente y la meta está muy lejos de cumplirse.

Este lunes, reporteros preguntaron al respecto al secretario de Desarrollo Energético, José Antonio de la Vega Asmitia.

Dijo que “mucha gente no lo ha hecho (regularizarse) porque se fueron de vacaciones, porque empieza el periodo escolar y tuvieron que gastar en útiles. Es normal que haya disminuido la afluencia”.

Confió: “Ya está comenzando a repuntar. Ahora que pase el regreso a clases, tenemos el estimado de que así será. Hay gente que debe 50 mil, 40 mil, 30 mil pesos. Es la oportunidad de dejar en ceros esa deuda y ponerse al corriente”.

Reveló:
“El programa está definido hasta el 31 de noviembre. Tenemos el estimado de que podría pasar de 300 mil nuevos contratos. Hay más de 550 mil deudores, en las estadísticas que se tenían por parte de la CFE.

“Es decir, que al principio se sabía que no se iba a llegar; pero también está previsto que vamos a ampliar, a poder ampliar el plazo después de noviembre, en el entendido de que todo aquel que se regularice en diciembre o en enero, se va a beneficiar del borrón pero tendrá que pagar su consumo de junio a diciembre”.

Nos parece que no es nada más que algunos hayan preferido gastar dinero yéndose a vacacionar o debido a los gastos escolares.

Evidentemente, la gravísima crisis económica impacta como nunca a los tabasqueños y ese es el principal factor que impide que muchos no hayan acudido a pagar lo consumido del primero de junio a la fecha y beneficiarse con el programa.

No es la primera vez que mencionamos en este espacio el siguiente dato que por razones obvias desconocen quienes nunca se han visto en situación económica extrema: hay personas que acuden a la infinidad de casas de empeño existentes en Tabasco, para empeñar hasta la licuadora o un juguete de sus hijos, con el afán de conseguir solo 40, 50, 100 pesos.

Muchísimos de los más de dos millones de habitantes de este estado malcomen y si ni siquiera tienen dinero suficiente para comprar medicamentos para la hipertensión arterial, enfermedades autoinmunes, etcétera, que cada día son más caros. En el sector salud escasean o de plano no hay.

Hay propietarios de pequeños o medianos negocios que deben hasta los calzones y luchan por mantener a flote sus fuentes de empleo, y aunque posean vehículo propio sus ingresos no les alcanzan y, para colmo, ni siquiera fueron contemplados en el programa de CFE.

No está simple la problemática. Igualmente los ayuntamientos están atorados con ese tema.
Twitter: @JOchoaVidal