Juan Ochoa Vidal
juanochoavidal@gmail.com

Es tu hora, Macuspana
Entre los pocos alcaldes que están cumpliendo sus compromisos con el electorado, independientemente de lo que quieran hacer o no los diputados de su partido con respecto a los saqueadores que encabezó Arturo Núñez Jiménez, vemos al de Macuspana, Roberto Villalpando Arias, sobreponiéndose ante las dificultades y en la realización de obras, así como en el mejoramiento de servicios públicos.

Desde campaña y ya al encontrarse en funciones a partir del 5 de octubre del año pasado, ha sido blanco de la más cochina guerra sucia. Se han metido hasta con su familia. Mucho de ello, pagado por José Eduardo Rovirosa, sobre quien pesan denuncias penales, a reserva de que la Legislatura local actúe.

Por mientras, producto de la gestión de recursos y pese a que el ayuntamiento ha estado saldando multimillonarios laudos y tiene que pagarle a CFE también mucho dinero, Villalpando trabaja en la pavimentación de calles y adelanta que en ese rubro se agregarán otros 80 mil metros cuadrados con concreto hidráulico, lo que incluye redes de drenaje y agua potable, así como banquetas y guarniciones.

En interacción con usuarios de Facebook, presentó en días recientes la maqueta de la Casa de la Cultura e imágenes de la rehabilitación de la Biblioteca Municipal, para que esas instalaciones las puedan utilizar en mejores condiciones los estudiantes de todos los niveles que este lunes regresan a clases.

Informó que además se trabaja en el Centro de Desarrollo Comunitario, el Polideportivo y en comunidades al igual que centros urbanos como San Carlos, de altísima significación para el partido que llevó al cargo a Villalpando, así como al gobernador y al Presidente de la República, porque se trata de una de las cunas del movimiento que emergió en 1988.

En respuesta a un señalamiento, Villalpando indicó que en septiembre se comenzará a pavimentar la calle Gregorio Méndez, que se ubica en la parte trasera del Palacio Municipal y cuyos vecinos solo veían pasar al fanfarrón que en su primer año de mandato se hizo famoso en el país por gritar el 15 de septiembre un “¡viva yo!”

“Estamos atendiendo a las personas vulnerables: este año construimos un poco más de mil mejoramientos de vivienda (cuartos adicionales) y 131 viviendas, con una inversión total de más de 76 millones de pesos”, precisó Villalpando.

Con la remodelación, la Biblioteca Municipal contará con nuevas computadoras, espacios para los ajedrecistas, un pequeño auditorio para actividades culturales y conferencias, y un área para que trabajen con sus alumnos los maestros de pintura.

Todas las noches, luego de finalizar su jornada habitual de labores, Roberto Villalpando se da tiempo para compartir sus actividades en Facebook e interactuar. Incluso aguanta insultos que pueden ser de gente real o de troles; que pueden corresponder a inquietudes reales o a guerra sucia orquestada por personas que no valoran esfuerzo alguno.

Por otra parte, es un hecho que a lo largo de muchísimo tiempo hubo mucho abandono y robo descarado en la administración pública, y las demandas sociales e insuficiencias o deficiencias crecieron tan solo por el crecimiento poblacional.

Se entiende, entonces, que en el mejor de los casos -lo que no sucede igual en todos lados- las autoridades hacen lo que pueden, hasta donde pueden.

Y también hay quienes somos muy buenos para criticar y exigir, pero no pagamos el predial, tiramos basura en la vía pública, no hacemos todo lo posible para evitar que nuestros hijos incurran en hechos delictivos, no cuidamos el agua, nos molestamos si en lo personal no nos da algo el gobierno aunque ya se haya pavimentado la calle y arreglado el alumbrado público, y en no pocas ocasiones aprovechamos cualquier oportunidad para el desahogo de frustraciones personales.

Gobernar a un municipio, a un estado, a un país, va siendo cada día más complicado. Peor aún si la autoridad no da la cara y carece de sentido común para atender los problemas, o se privilegia la reconstrucción de algún puentecito sin que se tratase de una urgencia habiendo otras que sí lo son, y que prevalece la arrogancia.

Para Villalpando, la ruta está definida: seguir trabajando y cumpliendo en lo humanamente posible.

Twitter: @JOchoaVidal