El presidente egipcio cede
Se mantiene fecha para el referéndum constitucional para el 15 de diciembre, como estaba previsto El Cairo El Universal El presidente egipcio, Mohamed Mursi, decidió ayer anular la polémica declaración constitucional por la que blindó sus poderes ante la Justicia, informó uno de los miembros del comité encargado de volver a redactar ese decreto. Según […]
10 de diciembre de 2012

Se mantiene fecha para el referéndum constitucional para el 15 de diciembre, como estaba previsto

El Cairo
El Universal
El presidente egipcio, Mohamed Mursi, decidió ayer anular la polémica declaración constitucional por la que blindó sus poderes ante la Justicia, informó uno de los miembros del comité encargado de volver a redactar ese decreto.
Según anunció en rueda de prensa el islamista Mohamed Selim al Awa, que participó en el diálogo nacional convocado por Mursi, el referéndum sobre la nueva Constitución se mantiene para el 15 de diciembre, como estaba previsto.
Una comisión recibió el encargo de volver a redactar la controvertida acta, que confería a Mursi un poder casi absoluto. En una entrevista al canal privado Al Mehuar, el primer ministro egipcio, Hisham Qandil, había adelantado que la comisión tratará “los asuntos que preocupan a algunas partes” y que posiblemente el resultado sería una nueva acta constitucional para acabar con la actual crisis política en Egipto, escenario de protestas y enfrentamientos entre partidarios y detractores de Mursi.
La comisión estará formada por cuatro personas, entre ellas el ex candidato presidencial Mohamed Selim al-Awa, un islamista moderado y el político liberal Ayman Nur, presidente del Partido Gad de la Revolución.
“La crisis terminará con el fin del acta constitucional, que se está reformando, y digo que el mensaje de los manifestantes ha llegado, por lo que les pido que vuelvan a sus casas porque ahora hay un diálogo nacional”, dijo el jefe de gobierno.
Qandil señaló que la remodelación va a insistir en la independencia de la justicia, pero mantendrá el mismo espíritu que la anterior. El primer ministro defendió la citada acta, promulgada el pasado 22 de noviembre y que, afirmó, “pretendía proteger y no crear un dictador, como dicen algunos”.
La tensión entre las distintas fuerzas egipcias, que ha derivado en violentos enfrentamientos, ha aumentado desde que Mursi blindara sus poderes ante la justicia con ese decreto y convocara recientemente a un referéndum sobre la nueva Constitución.
El miércoles, al menos siete personas murieron y cientos más resultaron heridas en choques entre los partidarios y los detractores de Mursi en torno al palacio presidencial, además de que han sido atacadas numerosas sedes del grupo islamista de los Hermanos Musulmanes.
Poco antes, en un comunicado, el ejército egipcio advirtió de “consecuencias desastrosas” si no se resuelve la crisis política del país.
El ejército consideró que el diálogo serio es la “mejor y única forma” de superar el conflicto sobre una controvertida Constitución aprobada por legisladores islamistas aliados del presidente Mursi y el decreto que le confiere inmunidad casi absoluta. “Otra cosa diferente a eso (el diálogo) nos obligará a entrar en un oscuro túnel con consecuencias desastrosas; algo que no podemos permitir”, indicaron los militares, que añadieron: “A ninguna parte le interesa no alcanzar un consenso. La nación entera pagará el precio”.
La oposición laica, en tanto, condicionó el diálogo con Mursi a que se cancele el decreto del 22 de noviembre y la convocatoria del referéndum sobre la nueva Carta Magna, pero al mismo tiempo convocó a nuevas protestas. Mohamed Abulgar, dirigente del Frente de Salvación Nacional (FSN) — que incluye a figuras como el premio Nobel de la Paz, Mohamed el Baradei, y el ex secretario general de la Liga Árabe, Amro Musa— dijo que su coalición está dispuesta a “un diálogo serio y positivo, no bajo amenazas” e instó a los jóvenes egipcios a manifestarse pacíficamente hasta conseguir las demandas de las fuerzas opositoras.

Compartir: