César Graciano Calvario
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Las reformas del presidente Peña están a prueba. Desde ahora. Es abusivo tratar de engañar a la gente con el estribillo de que los efectos se verán después del 2018, cuando los efectos negativos o la ausencia de resultados ya no se le puedan cargar a ninguno de sus padrastros. Porque la realidad de hoy día es que todas las reformas empiezan a desplegarse, con dificultades. Lo mismo la educativa, que la de telecomunicaciones, que la energética, y para no faltar, también la política.
La enésima reforma electoral fue uno de los principales productos de la reforma política, y dentro de esta la desaparición del que alguna vez fuera catalogado como el producto más acabado del proceso democrático iniciado en los 70’s, el IFE, para ser sustituido por el INE. El instituto nacional, por el federal. Casi los mismos consejeros. Algunas atribuciones adicionales. Y párele de contar. La misma gata, pero revolcada. ¿Otro IAVE, por IAVE? La opinión pública es muy escéptica al respecto y se mantiene expectante.
Dentro de esas nuevas atribuciones una en particular tendrá que ser puesta en práctica de inmediato. La organización de los 17 procesos electorales locales que tendrán lugar en junio de 2015. Sustituyendo en la función a los institutos locales. Que no desaparecen, pero que serán mirones de palo. Y para acabarla de distorsionar, su dirigencia (local) será totalmente sustituida por nuevos funcionarios, perdón, consejeros, que serán NOMBRADOS ¡por el propio INE!
Para lo cual este ha iniciado la selección correspondiente. Sin aceptar imposiciones de ninguna otra autoridad federal o local (incluidos los gobernadores, but of course), ni tampoco mano negra. ¡Aaaaahhh! ¡Pero eso sí! permitiendo que los mismos consejeros que actualmente cobran como tales y sin hacer nada puedan participar en el nuevo proceso de selección.
El asunto no pinta nada bien y aquí en Tabasco tenemos la prueba de ello. Los actuales consejeros del IEPCT, que supuestamente serán obligados a renunciar al cargo, ya han exhibido su pretensión de llevarse millonarias liquidaciones y aun así, se han presentado al examen en el INE. ¿Se imagina Usted al impresentable Armando Maldonado, o a los mustios Jorge Montaño, Antonio Ponce o Héctor Aguilar (son los que quedaron) presidiendo de nuevo ese organismo local? En ellos cayó el descrédito social por haber sido vinculados a las acciones fraudulentas para beneficiarse del mal manejo presupuestal del IEPCT. Los tiene acusados el OSF en la averiguación previa correspondiente. Son señalados por sus abiertas relaciones de interés político con grupos específicos y por su activa actuación sectaria en el pasado proceso electoral local.
Es claro que aún no se ha dictado una sentencia inculpatoria y que en el papel todos ellos son inocentes. Pero su descrédito es público. Y ya sabe Usted que para estos efectos se aplica la máxima romana de que “La mujer del César no solo debe ser honesta, sino también parecerlo” ¿El INE correrá el riesgo de volver a echarse estos alacranes a la bolsa? O más bien dicho ¿echarlos a nuestra bolsa? Por lo visto la reforma no lo blindó contra el ridículo y el rechazo social.
….a pie de carretera
José Antonio Aguilar Bodegas
Nadie sabe, nadie supo. Si a este priista chiapaneco lo obligaron a regresar para terminar una chamba mal encaminada y peor construida. O para suplir al delegado del CEN priista que nunca se apareció por aquí más que para comer y beber. O para purgar penas inconfesables. O simplemente como reconocimiento a su capacidad y paciencia para tejer de día lo que otros destejen de noche. El caso es que ya está nuevamente entre nosotros para tratar de hacerle la chamba a Erubiel Pastor, a quien ya ni sus borregos hacen caso y se van a meter a las casas de las vecinas.
Ahora que todo vuelve a la normalidad del ajetreo citadino, tomémoslo todo con calma. Le busco mañana aquí mismo SDQ. Adiu
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