Editorial: La paja en el ojo ajeno
La falta de capacidad creativa de opositores al gobierno, han elaborado un discurso, no solo recurrente: altamente repetitivo, con lapsos de terrible aburrimiento. Cuando mientes de manera cotidiana, esta pierde el sentido de pertenencia y en el espacio y tiempo, no sabes ya cuando es cierto o falso todo lo que dicen con singular ligereza. […]
15 de agosto de 2016

La falta de capacidad creativa de opositores al gobierno, han elaborado un discurso, no solo recurrente: altamente repetitivo, con lapsos de terrible aburrimiento. Cuando mientes de manera cotidiana, esta pierde el sentido de pertenencia y en el espacio y tiempo, no sabes ya cuando es cierto o falso todo lo que dicen con singular ligereza.
Por supuesto que Arturo Núñez no necesita defensas de periódicos modestos como el Rumbo Nuevo, habiendo grandes periódicos dirigidos por grandes intelectuales del periodismo, no pretendemos ser defensores, cuando en verdad la crítica carece de sentido político y social. Pero si nos sentimos frustrados que las descalificaciones improvisadas, supere la unidad que debe prevalecer en nuestra sociedad tan dividida en los últimos treinta años.
La búsqueda del poder por el poder, nos ha debilitado. Somos una sociedad en constantes conflictos internos. Tanto que en recientes acusaciones de desvíos de recursos, “escupieron para arriba”, resultan culpables los grupos que lanzan las acusaciones. Perdemos el sentido total de la proporción, sin importar a quien o quienes dañemos, ya sean propios o extraños.
Por lo pronto Núñez sigue ajustando el equipo. El despido del general, se veía venir, no servía para nada, y como los anteriores cambios, el gobernador merece el beneficio de la duda. Las acusaciones mediáticas son pruebas superadas con suma facilidad al carecer de sustento y su posicionamiento nacional como político e ideólogo de izquierda, el más importante en estos momentos que ocupa un cargo de relevancia en la República, despierta celos, rencores, corajes, frustraciones y sinsabores en el espíritu bélico de sus detractores.
Los grupos políticos tabasqueños seguirán operando de la misma forma, no tenemos remedio. No nos gusta ni nos acomoda nada, no vamos a cambiar nunca. En el caso de Arturo Núñez; lo único que espera Rumbo Nuevo, es que siga hablando con la verdad, y por supuesto, que no le tiemble la mano al realizar cambios que se requieren en ésta última etapa de su vida institucional como gobernador, no todo lo que relumbra es oro. El que pregunta y averigua, no se equivoca.

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