“La honestidad es la mejor política”.
Benjamín Franklin
Enrique Muñoz González
cayuco7@hotmail.com
El ingeniero Leandro Rovirosa Wade es un distinguido mexicano, logró hacer historia de la buena, como funcionario público, como ciudadano ejemplar, un padre de familia responsable y un mejor ser humano. Gobernó Tabasco de 1977 a 1982, y como apuntamos el lunes, ha sido el último mandatario de seis años en la entidad.
Don Leandro, puede presumir haber sido uno de los mejores gobernadores de su tierra Tabasco, donde consiguió hacer amigos, y sobre todo sembrar y cosechar amistades para toda la vida. Es el constructor del Tabasco moderno, del Hospital Rovirosa, los pasos a desnivel, el Cicom y el teatro “Esperanza Iris”.
Leandro Rovirosa, vino a Tabasco siendo un poderoso Secretario de Recursos Hidráulicos, amigo del Presidente de la Republica, Luis Echeverría, en una oportunidad política la cual no buscó, es más, se resistió un poco a vestirse de gobernador, pues era en el ámbito nacional un eficiente Secretario. Según me contó alguna vez en el que fuera su domicilio en Tabasco 2000.
El Ingeniero Rovirosa es uno de los técnicos que diseñaron y construyeron la Presa de Malpaso, uno de los mejores conocedores de la obra hidráulica y también conocedor del suelo del sureste de la República a la perfección. En una entrevista que tuve la oportunidad de hacerle en las estaciones de radio de Gerardo Gaudiano Peralta en ese entonces la 620 de la A.M. y la 970 conocida como Stereo Rey, así como la 99.9 FM de Emiliano Zapata, señalaba que el suelo tabasqueño es como una mesa de billar, una verdadera planicie.
Para muchos, Leandro Rovirosa es considerado el Gobernador que modernizó el estado, con su Tabasco 2000, y por supuesto el aeropuerto de esta ciudad. Su lema era “Tabasco Avanza”, logró incluso un presupuesto considerable el cual lo vino a ejercer quien lo sucedió en el cargo, Enrique González Pedrero, sin embargo fue Don Leandro, quien exigió que Tabasco tuviera las justas participaciones por la enorme riqueza de hidrocarburos que aporta a la Federación.
No sólo la llamada clase política y los constructores recuerdan con cariño y respeto al Ingeniero Rovirosa, los chontales vivieron uno de los mejores gobiernos con el programa de los camellones chontales, inversión sin precedentes, por cierto estaba a cargo de Andrés Manuel López Obrador. Don Leandro sabe que al final de cuentas la primera oportunidad política él es quien se la da al nativo de Tepetitán, Macuspana.
El Ingeniero Rovirosa, no sólo construyó caminos, puentes y casas, también fue el creador de la primera contraloría del país cuando era Secretario de Recursos Hidráulicos, y ya en Tabasco como Gobernador de Tabasco fue ejemplo nacional al inaugurar la primera contraloría del país. La autonomía presupuestal de los Poderes Legislativo y Judicial se lo deben también al ex gobernador.
Las Casas de la Cultura de los municipios fueron creadas en su gobierno, el deporte tuvo un apoyo sin precedente. Municipios y Villas tuvieron centros deportivos, como no se ha vuelto a dar.
El tabasqueño, Leandro Rovirosa Wade, descubre la impredecible fuerza del agua en su niñez. Siendo adolescente se deslumbra con la trascendencia de la ingeniería en cualquiera de sus vertientes. En la juventud integra ambos conocimientos en sus estudios encauzados a la ingeniería hidráulica.
Su carrera profesional en el medio privado lo lleva el éxito, al desarrollarla con brillantez. Poco después, en el sector público vierte sus conocimientos especializados a favor de la nación, aportes que se le reconocen.
Su desempeñó como gobernador, junto a su esposa, doña Celia González, que es recordada con mucho cariño, dejó un sentido social a la obra de gobierno, en una época laboral romántica, cuando no existían domingos ni fiestas que guardar. Como gobernador de Tabasco deja una obra de vital importancia, manifiesta en tareas de gestión, y en obras materiales. Su vida es ejemplo de sentido del humor. De lucha, de triunfo personal y de servicio social al país. Sin duda un tabasqueño honorable como pocos hoy en día.
En los doscientos años de la Independencia de Méjico y a cien años de la Revolución Mexicana, Leandro Rovirosa Wade representa la cara del éxito en cualquier momento de su vida, sin tachaduras. Esto último es parte del Libro Hombre de Agua: Leandro Rovirosa de Edith Ofelia Jiménez Izundegui, de Editorial Gernika, publicado en el 2010.
El ex gobernador de Tabasco nació en 1918, acaba de cumplir 94 años, y aún está muy lúcido, tan así que ha invitado a la “Mesa de Periodistas Rodolfo González Maza” a su domicilio en la ciudad de Méjico, para un desayuno de amigos. Sin duda un encuentro histórico, con periodistas como: Erwin Macario Rodríguez y Jacinto López Cruz, columnistas de Rumbo Nuevo. José Luis Gutiérrez Gutiérrez y Ausencio Díaz Trinidad, columnistas del Periódico el Heraldo.
Otros compañeros periodistas quienes estarán el fin de semana en la capital de la República son: José Antonio Calcáneo Collado, Director del Diario de la Tarde, columnista y Presidente del Club de Periodistas de Tabasco. José Antonio Caraveo Maldonado, Director de la revista CLIP y columnista nacional del Diario El Día, y por supuesto este columnista.
La Piragua
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación dictaminó ayer en su sala regional de Xalapa, que el petrolero, José del Pilar Córdova, sí puede ser diputado local plurinominal; hace dos semanas advertíamos en este espacio que esto podría ocurrir, porque el líder del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps, negociaba al más alto nivel esta posición, y se la concedieron.
