José David Sánchez Plaza
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Existe un dicho popular que dice, “debo no niego, pago no tengo”. Así es como la administración del gobernador Arturo Núñez Jiménez, está actuando en contra de los proveedores tabasqueños, quienes de manera permanente  han denunciado los engaños y promesas incumplidas de los funcionarios encargados de atenderlos.

Dicen que cuando cambia una administración ya sea federal, estatal o municipal, los nuevos funcionarios, por ley deben asumir y aceptar los compromisos que establecieron sus antecesores. Se dice que los hombres cambias las instituciones permanecen.

No se debe olvidar aquella postura que asumió el ahora dirigente estatal de MORENA, Javier May Rodríguez quién fue severamente criticado porque no quería reconocer un supuesto adeudo por 20 millones de pesos, que su antecesor, Gregorio Arias Pérez dejó en la administración de Comalcalco con constructores y empresarios de aquel municipio.

Ya se ha dicho de la difícil situación financiera en la que el gobernador Arturo Núñez Jiménez recibió el gobierno. Al inicio de su mandato se reconoció que tenían adeudos con proveedores por más de tres mil millones de pesos.

Son casi 16 meses que inició Núñez Jiménez su mandato y aún mantiene adeudos con proveedores tabasqueños por más de mil 500 millones de pesos, sin que el secretario de Finanzas, Víctor Lamoyi dé un argumento válido para decir el motivo por el que no han cubierto ese pasivo.

De manera permanente se escucha al gobernador Arturo Núñez que no se tienen los recursos económicos suficientes para cubrir las necesidades del gobierno.
Se podría apoyar y respaldar la postura del mandatario estatal si se viera que realmente en la administración gubernamental se tuviera una austeridad en salarios y gastos de otra índole.

¿Realmente en la administración estatal no hay dinero? ¿Ha cumplido Núñez con su plan de austeridad que anunció? ¿Cuánto es el incremento a los salarios que se han autorizado los funcionarios de primer nivel?.

Cómo se puede entender que la mayoría de los secretarios de estado -sino es que todos-, coordinadores de áreas gubernamentales y funcionarios de primer nivel, utilizan para su uso personal flamantes camionetas suburvan o vehículos último modelo. No que no hay dinero.
Al inicio de la administración, Amet Ramos Troconis, ex titular de la secretaria técnica y ahora al frente de la secretaria de Administración, sostuvo encuentros de trabajo con Alberto Falconi e integrantes de su asociación, en las que se comprometió ha gestionar el pago. Han pasado casi 16 meses y los proveedores están a la espera de que cumpla su compromiso.

Ramos Troconis ahora ocupa la secretaria de Administración, lugar de dónde puede gestionar y ayudar a los proveedores tabasqueños para que la secretaria de Finanzas les haga sus pagos, pero ahora “no ve, ni escucha”.

Destacable es el valor del presidente de la Asociación de Proveedores Tabasqueños, Alberto Falconi, que ha tenido para hacer público el incumplimiento en el que de manera permanente ha incurrido la administración Nuñista, para cubrir los adeudos que sostiene desde el inicio de su administración con empresarios tabasqueños.

Hace unos días comentábamos algunos compañeros, qué es lo que a una persona le ocurre cuando llega a un cargo público o de elección popular porque se transforma. Se olvidan de lo que fueron antes y de cómo se comportaban, sufren el “mal del tabique”.

El gobernador Arturo Núñez debe atender de manera personal la demanda que esos proveedores tabasqueños han hecho desde que inició su administración, porque por mucho o poco que el gobierno del Estado les deba es dinero que necesitan.

La deuda que tiene el gobierno del Estado con instituciones bancarias no la ha dejado de cubrir o renegociar, porque las instituciones bancarias de alguna u otra forma harían cumplir al gobierno del Estado, con el compromiso que firmó.

Obviamente que los empresarios tabasqueños no tienen el poder ni los recursos de una institución bancaria, pero por institucionalidad se les debe pagar.

Lo Sobresaliente
Interesante por demás se puso la contienda por la dirigencia estatal de la CNOP al inscribirse el ex diputado local del PRI, Humberto Villegas Zapata. Tito como muchos amigos le llaman tiene un amplia trayectoria en la política, además de haber ocupado una curul en la pasada legislatura local, por muchos años se desempeñó en la presidencia de la Comisión Estatal de Procesos Internos, pues hay que ver si no hay “línea” a favor de José Dolores Espinosa May.