• El voto en el 18 del fue una lección no entendida por Morena
• Quedarían en estado de indefensión candidatos del PRD
• Meyer debió notar anomalías en obras y RV protegido de Morena

Antonio Caraveo Maldonado
caraveo20162016@outlook.com
Los animalitos. El escupitajo de hace años, en su papel de opositor de ya YSQ, externo, “si el PRI, cuando era el todopoderoso, ponía una vaca de candidato, ganaba”.

Pasaron los días y las noches, hasta llegar al uno de julio del 2018, de aquella frase, cuando en las candidaturas de Morena aparecieron no tan solo vacas al igual burros, con perdón de los animales citados.

Ahí ganaron gubernaturas, presidencias municipales, diputaciones federales y locales, y son con quienes gobiernan actualmente, en su mayoría los gobernantes están dejando una estela de corrupción y solapada, sobre todo en la entidad, por los legisladores y el Órgano Superior de Fiscalización (OSF) del Congreso local.

Ahora se le debe agradecer a Morena en Tabasco de ya no apostar por muchas vacas y burros, al observarse nombres con capacidad para detentar el poder y hacer un buen trabajo, pero hay casos, de no verse así, y de ganar, serán unas figuras decorativas y los municipios seguirán pagando esos desatinos.

Al final del día, los votantes decidirán por quién ir. Les quedó claro en el 2018 que con su sufragio dieron una lección ejemplar de sacar del poder a quienes se beneficiaron con recursos públicos, y mirando a los nuevos gobernantes repiten ese mismo esquema de corrupción y parecieran retar al electorado de no ser capaces de volver ir a las urnas. ¡Cuidado!

De bajada
a) La amenaza del dirigente del PRD, Javier Cabrera, de retirar a sus representantes del Instituto Electoral y Participación Ciudadana (IEPCT) es una verdadera jalada. Es como dejar en estado de indefensión a sus candidatos y al propio partido. Ese lance, puede ir dibujando los acuerdos con el partido en poder. Militantes de Huimanguillo y Cárdenas, me hacen la observación.

b) Alfredo Javier Payro, decidió dejar de lado sus aspiraciones a la candidatura a la alcaldía por el partido en el poder y sumarse con la diputada Beatriz Milland, al aceptar la dirigencia municipal de Morena. Ante las pocas posibilidades de ganar la Milland, sería el secretario del ayuntamiento. De su equipo de trabajo no admitió su decisión y le dieron la espalda y se fueron a respaldar a Ana Castellano, abanderada del PRD a la alcaldía. Por cierto, la perredista sumo al químico Pedro Salazar Collado, entre otros cuadros.

c) Una visita sorpresa realizó el secretario de Sedatu, Roman Meyer Falcón a Macuspana, a la tierra del Presidente, sin compañía de funcionarios del estado ni municipal a fin de supervisar las obras dentro del programa “Mejoramiento urbano” a la Villa Benito Juárez. Tal vez no le informaron de lo mal construida la obra en el parque de esa Villa e innecesaria ante los caprichos del ex edil Roberto Villalpando, quien fuera separado de su cargo por desvíos de recursos y hasta la fecha lo siguen protegiendo en Morena desde el Congreso local. La denuncia de la ciudadanía sobre lo mal hecho de la obra se la haya tomado en cuenta el funcionario federal y ordene a la constructora arregle los desperfectos. d) Alfredo Mena Mayo se perfila a la candidatura del PRI a la diputación local por el IV Distrito electoral que comprende Huimanguillo-Cárdenas. Sin duda, el actual regidor del ayuntamiento de Cárdenas va ser el adversario a vencer.