• Las haciendas municipales de ex alcaldes y actuales, la piedra
• “Al no darle a Morena en las elecciones irían por Peña Nieto”
• Verde y MC en pepena de aspirantes del PRD, PRI y Morena

Antonio Caraveo Maldonado
caraveo20162016@outlook.com
Las cuentas. Con la sesión de hoy en el Congreso local, quedaran ocho para concluir el segundo periodo ordinario de sesiones. En ese espacio deberán bajar al pleno para su aprobación de la hacienda pública de los tres poderes del estado y de los 17 presidentes municipales.

Siendo mayoría los de Morena en el Poder Legislativo andan entrampados con las cuentas públicas, principalmente de sus correligionarios en los ayuntamientos y del pasado.

Además, la preocupación de evadir la sospecha de darle la protección a ex funcionarios de la pasada administración, a los ex alcaldes de Morena de Macuspana y Jalapa, destituidos por actos de corrupción, además de otras alcaldías en enredos con los dineros públicos.

Revisan la fecha propicia, donde haya la menor contrariedad, es decir, no le cause ruido y si la quieren ocultar con las cuentas del pasado, no les va funcionar. Tienen tatuado en la frente de haber aprobado la cuenta del sexenio pasado en una franca complicidad, aun cuando el estandarte cero corrupción e impunidad, lo tienen rayado.

Será complicado el respetable se las deje pasar, al haber actuado como cómplices y un año posterior, tibiamente procedería contra ellos, dándolo como un aviso, de huir y casualmente hoy no los encuentran.

En las tareas legislativa, a principios de diciembre, el informe de labores del presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Enrique Priego, quien no tendrá contratiempo.

De Bajada
a) El periodista José Ureña en su columna Teléfono Rojo, publicada en el diario capitalino 24 Horas, desde noviembre del 2019, avizoró de complicársele las elecciones a Morena en las intermedias del 2021, el presidente López Obrador tomaría la decisión de llegar hasta al ex presidente Enrique Peña. En estas fechas, los números a favor de los morenistas no son tan claros a seis meses y 13 días de las votaciones, donde están en juego la Cámara de Diputados, 15 gubernaturas, Congreso locales y cientos de alcaldías, y así parece. Al trascender la decisión de Rosario Robles, ex secretaria de Desarrollo Social de convertirse en testigo protegido, apuntando de ir directamente contra su antiguo jefe. La ex jefa de gobierno, dará un giro en las investigaciones con quienes estuvieron involucrado en la estafa maestra y la señalan. ¿Le entregara la cabeza de Peña Nieto a Palacio Nacional? Valen apuestas.

b) En el rejuego de las candidaturas, principalmente en Morena, PRD y PRI, pierdan algunos cuadros, cuando no sean nominados, los dos últimos por la naturaleza de la propia alianza en caso de concretarse, y otros, porque se sienten los “elegidos”, estarían terminando en el Verde Ecologista, sinónimo de Morena, en Movimiento Ciudadano o en Redes Sociales Progresistas, quienes andan en la pepena en busca de candidatos y le genere votos, aunque no ganen, sobre todo en los abanderados a diputados a fin de estar en la ubre presupuestal del órgano electoral.

c) Aunque algunos actores políticos han echado las campanas al vuelo de dar por hecho la alianza electoral entre PRD-PRI-PAN, aunque estén cerca de la orilla, las corrientes peligrosas las pueden arrastrar y sepultarla.

d) En el PRD vieron la renuncia de Juan Gabriel Sánchez del municipio de Cárdenas a sus filas, como una maniobra del diputado Agustín Silva en la intentona de desacreditar a su ex partido. “Él lo “aceita” y una golondrina no hace verano”.

e) En esa subida de realizar bien la tarea o no, los “Servidores de la nación” de Bienestar Social en la faena de censar a todos los damnificados va repercutir en varias direcciones, más porque el padrón de los afectados crece por el desbordamiento del río Usumacinta. Ahí estarán al pendiente los partidos de oposición. Ya el senador Juan Manuel Fócil ante la sospecha de beneficiar a militantes o quienes simpatizan con Morena, propuso sea incluido el Ejército y Marinos, para llevar a cabo el censo, al tiempo de convocar a la ciudadanía a organizarse para ser censados y recuperar un poco de lo perdido.