No hacía mucho de haber coparticipado en el simulacro nacional de sismo 2023, cuando la Legislatura 64 al Congreso local comenzó el ordenamiento de la casa: el pleno aprobó el combate oficial a la holgazanería que ha depreciado la esencia del Poder Legislativo.

La señal de lo que la diputada Marritza Mayeli Jiménez Pérez, coordinadora de la bancada del PRI, consideró, en tribuna, como una legislatura de «consensos» y que sentará «precedente», fue el inesperado inicio de la primera de la doble jornada al filo de las 10:54 horas. Esto es, seis minutos antes de la acostumbrada cita a las 11 que, cual actitud mexicana, se incumple.

Una excepción que se enmarcó en la hora para cumplir con el simulacro nacional 2023 en la parte frontal al Palacio Legislativo en Plaza de Armas, lugar en donde también se concentaron los servidores públicos de los poderes Ejecutivo y Judicial, encabezados por sus titulares el gobernador Carlos Manuel Merino Campos y el magistrado Enrique Priego Oropeza.

Y ya en funciones, resurgió una muestra del pasado reciente cuando a las 11:14 se reanudó la asamblea y tras el pase de lista a 28 de 35 posibles: la autorización de licencia temporal por «incapacidad médica» a la diputada Rosana Arcia Félix; permiso con goce de sueldo que será del 10 de abril al 9 de mayo.

No fue el único caso del pasado. Durante el receso entre una y otra sesión, la comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales aprobó la solicitud de licencia de Casilda Ruiz Agustín que, a propios y extraños, devela las componendas interpartidistas como la del Movimiento Ciudadano que pronto será representado por Fanny Vargas.

Si en la primer asamblea se fueron integrando al pleno representantes populares como Rafael Elías Sánchez Cabrales que cada que puede hace visible su ausencia aunque esté en el interior del recinto, en la segunda la mesa directiva justificó cinco de ocho inasistencias. Ausencias que habían votado por la zamarreada de gajo para sancionar a los faltantes «justificados».

El movimiento telúrico aprobado por el pleno, adiciona, reforma y deroga diversas disposiciones de la Ley Orgánica del Poder Legislativo y de su reglamento interno. Al caso, es definitivo el considerando Cuarto de la iniciativa al consignar que las justificaciones de faltas por motivos no claros afectan las actividades en comisiones, en el pleno y en la misma Junta de Coordinación Política. Una imagen ciudadana ganada a pulso que, dice el dictamen, se manifiesta en los medios de comunicación convencionales y en las plataformas digitales.

Pero no todo es albricias. La jovialidad, optimismo y cortesía del diputado Emilio Antonio Contreras Martínez, presidente de la mesa directiva, a veces, raya en lo romántico. La propia legislación acota pronunciamientos como el darle la bienvenida a la madre de la diputada Jiménez Pérez. Incluso, los recurrentes aplausos por las intervenciones en tribuna son descalificados por la norma vigente. Pero…

De todas formas, queda claro que la realidad superó al simulacro sísmico debido al impulso del diputado Jaime Humberto Lastra Bastar por poner orden en una casa que procura reconciliarse con la ciudadanía con hechos. De eso trata la actualización de la Ley y Reglamento del Poder Legislativo.

La trascendencia o el sentar «precedente» como afirmó la diputada del PRI, será en consecuencia la percepción ciudadana que pondere a la Legislatura 64 al Congreso local que, coordina desde la Jucopo, el diputado Jaime Humberto Lastra Bastar.
Luis Enrique Martínez
Rumbo Nuevo