Desbordaba felicidad la diputada Dolores del Carmen Zubieta Ruiz, cuando, presurosa, abandonó el pleno para tomar el pasillo del auditorio, cruzar el vestíbulo y, en seguida, tomar el ascensor que la llevaría a su oficina en el Palacio Legislativo. Iba con el entusiasmo con el cual celebró la aprobación unánime de la «Ley 3 de 3».
De esa emoción salió el grito «¡bravo!» que hizo ponerse en pie a la legisladora y junto con ella a sus homólogas que, como prueba de la apertura de espacios públicos a la mujer, fueron mayoría en la doble sesión que desahogó la Legislatura 64 al Congreso local. Señal de los tiempos es que ésta la integran 19 diputadas de 35.
No lo expresó con esos detalles la diputada Soraya Pérez Munguía cuando en asuntos generales de la segunda ordinaria, reconoció la apertura del diputado Jaime Humberto Lastra Bastar, quien como presidente de la Junta de Coordinación Política empujó la aprobación local de la legislación que excluye a violadores de género de participar en política electoral.
La algarabía que desató la aprobación de la homologacion de la norma federal en Tabasco, ya no la secundaron las alumnas del colegio Tabasco por abandonar el recinto al final de la reunión inicial. Sí lo hicieron, las estudiantes de derecho de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, quienes, al igual que las legisladoras, exhibieron el cartel que previamente fue distribuido al entrar al auditorio con la leyenda «3 de 3 va».
Pero el júbilo por la reinvidicación femenina, para variar, sembró confusión o, mejor dicho, recordó el dicho popular según el cual «el enemigo de la mujer es otra mujer». Sepan porqué.
En asuntos generales de la primera sesión, que en realidad fue en la cual se aprobó la reforma a la Constitución Política de Tabasco, en materia de género, la diputada Norma Araceli Aranguren Rosique, subió a la tribuna para acreditarse la autoría de la iniciativa en cuestión. También reconoció la disposición del diputado Lastra Bastar, pero la distinción fue devuelta de inmediato por la representante de Morena, Diana Laura Rodríguez Morales: «Muchas felicidades, Cheli».
Aunque la diputada Maritza Mallely Jiménez Pérez intervino en la doble sesión, no obstante su engolada voz no trascendió más allá de la presentación de la agenda legislativa de la fracción parlamentaria del PRI, que, en su momento, también hicieron Miguel Ángel Moheno Piñera, Juan Álvarez Carrillo y Rosana Arcia Félix, por el PVEM, PRD y Morena. Un trámite como la autorización de la mesa directiva a la diputada Ana Isabel Núñez De Dios para ausentarse del 11 de septiembre al 23 de octubre de las actividades oficiales.
En las primeras filas del auditorio estaban mujeres representantes del poder, sobre todo electoral. Por ejemplo, Elizabeth Nava Gutiérrez, Roselvy del Carmen Domínguez Arévalo, Ofelia Méndez Morales, Margarita Espinosa Armengol…
Ellas también celebraron la aprobación unánime…pero, pero, algunas, las que se quedaron al final de la doble sesión, también escucharon a la diputada Pérez Munguía invocar cuando, en 2019, era diputada federal y promovió la reforma constitucional referida. Lo hizo luego que su homologa Isabel Yasmín Orueta Hernández sostuviera que la aprobación era producto del «compromiso de la transformación».
—Qué emocionantes tiempos estamos viviendo. Qué emocionantes tiempos estamos viviendo las mujeres—, festejó la diputada del PRI al aventurar que el futuro de México y Tabasco será «el tiempo de las mujeres».
Por eso y más, Zubieta Ruiz avanzaba sin par…
Luis Enrique Martínez
Rumbo Nuevo