Muchos de los militantes mostraron tanto su respaldo como su rechazo a cada uno de los aspirantes que asistían a la sede del tricolor en el estado

Luis Enrique Martínez
Rumbo Nuevo
Nunca la obstinación de Brígida Hernández fue tan oportuna como en el registro dominical de aspirantes a diputados locales por el PRI: “Esta gente es pura hipocresía”, sentenció cuando Adrián Hernández Balboa rechazó darle un beso a la desaliñada y furibunda defensora del Revolucionario Institucional.
El pertinaz reclamo de la mujer que ya se convirtió en parte de la alegoría popular regional, provocó una sonrisa nerviosa en Hernández Balboa quien, arriba del estrado del auditorio de la sede estatal priista, buscó refugio en la mesa de recepción de documentos a los aspirantes a una diputación local, a la cual acudió a inscribirse para el VI Distrito Electoral igual como hacía diez días, el 25 de febrero, lo había hecho pero para competir en la contienda interna por la postulación a la alcaldía de Centro.
Esa inconsistencia personal, fue el origen de las especulaciones que predominaron durante las cinco horas, que duró el registro de 42 aspirantes a diez diputaciones locales ante la mesa de procesos internos y de postulación.
Una serie de conjeturas que crecieron cuando pasado el mediodía Francisco (Paco) Celorio, solicitó su inscripción por el mismo distrito al cual aspira el ex dirigente estatal del PRI. Y esa presencia, que permitió confrontar la capacidad legislativa de los rivales de un distrito de 92 mil ciudadanos empadronados, 89 mil de ellos en la lista nominal y que dispondrá de 153 casillas para cubrir sus 65 secciones electorales.
–¿Usted sabe cuántos artículos tiene la Constitución Política de Tabasco?—se le preguntó a Paco Celorio al pie de la explanada de la sede tricolor cuando, luego de inscribirse, iba hacia la esquina izquierda de las avenidas 16 de Septiembre y César Sandino, donde, hacía rato, lo esperaba su padre Francisco Celorio acompañado de amigos y seguidores como Jesús Taracena Martínez, Irving Orozco Juárez, José Roberto (Cheveto) del Rivero del Rivero y Eugenio Mier y Concha, entre otros.
“¡Ciento veintitrés!”, respondió con una inusual parquedad luego de recibir la asesoría de Juan Molina Becerra, a quien el reportero le había confiado la preparada pero breve evaluación, para los aspirantes al sexto distrito electoral local.

Llegó Balboa
Dos horas después, la misma consulta se hizo a Hernández Balboa, quien a diferencia de su rival interno –que había dado un número diferente a los 84 artículos y 12 transitorios que integran los nueve títulos de la Constitución Política local, según la reforma del 18 de junio de 2014 publicada en el Suplemento E del Periódico Oficial número 7491 con fecha de 24 de ese mes y año–, contestó con una inesperada invitación:
–¡Sí, cómo no! El día que tú quieras no los comemos juntos…
–¿Cuántos?—se le insistió cuando de golpe cortaba la entrevista colectiva en la cual señaló que el PRI “no puede ser rehén de nada”.
“El día que quieras….”, evadía aun cuando descendía del estrado respondiendo a otros cuestionamientos: “En el partido necesitamos a todos…No es sencillo este paso pero creo que lo fundamental es cubrir los requisitos y que la propia comisión establezca quien los cumple y seguir el proceso…
“Tenemos que sumar no van a recibir de  mi ninguna expresión de descalificación hacia nadie…no puede transitar el PRI hacia el escenario de 2018 sin el tránsito, sin la aduana de 2018. En este 2015 necesitamos a todos. Entiendo las expresiones, entiendo los cometarios y los respeto mucho”, manifestó su mencionar el nombre de su rival Paco Celorio.
Y cuando las mujeres se repartían las rosas que se distribuyeron en la mesa de inscripción con motivo del Día Internacional de la Mujer, Brígida, la infaltable, Brígida, volvió con su queja: “Son unos hipócritas, no se dejan besar…”