Deudores y cobradores, la pelota en la cancha de la CFE

José V. Martínez
Ante el ruido que recientemente ha provocado el tema de los deudores y la Comisión Federal de Electricidad, este columnista se pregunta si el problema es del gobierno estatal o es de la empresa productiva del estado (antes paraestatal) y por ende del gobierno federal. Pareciera, por lo que escuchamos todos los días, que le han dejado toda la responsabilidad a la administración de Arturo Núñez y que en lugar de que se trate de un conflicto entre quienes reciben el servicio y no lo pagan con la empresa prestadora, fuese algo exclusivo del mandatario estatal.

Pues resulta que no. El gobierno de Núñez interviene como mediador al tratarse –en una de sus aristas- también de un asunto político iniciado en 1995 con la llamada resistencia civil. Pero…

No es el gobierno del estado el que le debe a la CFE, ni es el gobierno del estado el que le está cobrando a los más de 570 mil usuarios morosos en Tabasco. No es el gobierno estatal el que fija las tarifas, ni es el que ordena y aplica los cortes de electricidad a quienes no pagan. Aunque existe un adeudo de los municipios y de algunas dependencias, se trata de una morosidad explicable; sólo un atraso en los pagos. En muchos casos menor.

Como se ha documentado en otros medios y lo referimos en esta columna, tampoco son los tabasqueños los únicos deudores del servicio de electricidad. Ahí están los casos de Edomex y el Distrito Federal, que en agosto del 2013 tenían un monto de rezagos superior al de Tabasco: en el primero el adeudo de los usuarios era de 10 mil 608 millones de pesos, mientras que en el segundo de 10 mil 541; en ese tiempo esta entidad estaba registrada con un débito de 7 mil 332.

El total del adeudo reportado por la CFE en todo el país era en aquel momento de 45 mil 797 millones de pesos.

Otras entidades con población rezagada en sus pagos eran entonces Chihuahua (2 mil 919 pesos), Chiapas (2 mil 504), Coahuila (2 mil 931), Guanajuato (2 mil 342), por sólo citar algunos.

Habría que preguntarse si era o es un problema de negativa de cobro por simple capricho o si es resultado de una necesidad; o si es resultado de la incapacidad de la entonces paraestatal para cobrar. Imaginemos el personal que tendría que desplegar la empresa para tomar la lectura de cada uno de los millones de medidores en toda la república, algunas zonas de difícil acceso.

Es un problema de la CFE. Pero también el actual gobierno de Núñez hereda una complicación de varias décadas y diversas circunstancias, iniciado masivamente en 1995; podría decirse que tenía el compromiso de resolverlo por provenir de un movimiento (el del PRD y el lopezobradorismo) que impulsó la “resistencia civil”, pero si vemos que esto sucede en todos los estados podemos fácilmente concluir que se trata de un diferendo entre el prestador de servicios y los usuarios.

Sólo que no es o no era un prestador de servicios cualquiera, sino que parte de una empresa administrada por el Estado Mexicano, que tuvo una vocación social y que cuando se extendió la red de energía eléctrica se planteó también como una acción del “Estado Benefactor”. La pelota está en la cancha del gobierno federal del que depende si se encuentra un salida o se anteponen obstáculos, independientemente de la acción opositora o con tintes electoreros.

Haberes
CON CIEN expositores arrancó el Sexto Festival del Chocolate que ya se hizo tradición en Tabasco…ES ABSURDO que Tabasco sea el primer generador de gas en el país y no tenga esquemas de aprovechamiento local, dijo el gobernador Arturo Núñez al inaugurar un curso especializado en la UJAT.