Posible baja de gas en el Sureste; Pemex dice que no

José Martínez
La semana pasada la situación de Pemex volvió a colocarse en la agenda pública. Por un lado, una calificadora internacional dio una valoración crediticia negativa a la petrolera mexicana argumentando que son los efectos relacionadas con la política petrolera que implementará el próximo gobierno.

Lo interesante es que la calificadora, que ahora otorga una valoración negativa, fue una de las que señaló en el 2013 que la reforma energética resultaría favorable para México, y pedía tiempo para ver los resultados. Usted juzgue.

Sin embargo, ahora se adelanta a los actos no ocurridos y enciende las alarmas a sus aliados. No es lo único negativo de la reforma energética a casi cinco años de su aprobación.

Pemex anunció desde hace semanas que ante la falta de extracción de hidrocarburo tendría que empezar a importar el crudo para atender la demanda interna. Las peores pesadillas en materia energética para los mexicanos se hicieron realidad con la compra de millón 400 mil barriles de petróleo al extranjero.

Esta situación negativa se fortalece con el anuncio de un posible desabasto de gas natural en el sureste mexicano ante la falta del energético en manos de Pemex por lo que solo las entidades del norte tener el combustible como lo han hecho del mercado de los Estados Unidos. Ahora oficialmente se dice que la nota no tiene sustento. Veremos.

Lo que se omite mencionar es que desde el año 2013, después de aprobarse la reforma energética, se ha seguido la misma política de ahogar a Pemex mediante el cierre de los recursos públicos para el mantenimiento e incremento de su infraestructura y producción.

Hasta hoy la empresa productiva del estado ha dejado de destinar recursos para el mantenimiento de pozos productores, por lo que se han cerrado de forma temporal o definitiva.

De las refinerías mejor no hablar. Es del conocimiento público que están trabajando casi a la mitad de su capacidad con el objeto de privilegiar la importación de gasolina.

La misma situación ha ocurrido en la distribución de la infraestructura de gas natural. A pesar de ser el Sureste, principalmente Tabasco, los grandes productores de gas natural no se aprovecha de forma idónea, aunque todavía se importa el gas.

La política energética que hasta ahora se ha implementado en México busca llevar a la iniciativa privada a invertir en estos campos y que sean ellos los que resuelvan la problemática, todo a costa del consumidor, quien paga las malas decisiones.

Andrés Manuel López Obrador y su equipo han señalado que estos anuncios solo son el reflejo del fracaso de la reforma energética, una reforma cuyos contratos serán objeto de revisión. Adicional se ha programado la inversión de 175 mil millones de pesos.

Estos recursos serán destinados para la rehabilitación de las refinerías existentes en el país. Así como incrementar la extracción de hidrocarburo y la construcción de una nueva refinería. Por lo menos esos son los cálculos y las intenciones. Como se dijo en una campaña: hablarán los hechos.

Haberes
La caravana de migrantes centroamericanos que atraviesa actualmente el país fue objeto de un diferendo entre autoridades de México y EU. El Presidente de Estas Unidos, Donald Trump, anunció el recorte de la ayuda económica a Centroamérica por esta migración masiva, y lamentó que México no los pueda contener. Trump está aprovechando también la xenofobia para hacer campaña ante las próximas elecciones en su país. Peña Nieto, en México, sostiene que no se dejará presionar.