Proyecto petrolero por más de 7 mil millones de pesos a Tabasco

José Martínez
En diciembre de 2013 el Congreso de la Unión aprobó lo que se ha denominado la Reforma Energética. Los argumentos fueron que con la entrada de las empresas privadas al sector los costos de la gasolina, gas LP y energía eléctrica bajarían.

A casi cinco años de la aprobación los beneficios de los cambios constitucionales no han llegado. Muy al contrario, el país entró en una crisis ante la caída del precio del petróleo cuyos mayores impactos se han sentido en los estados de Tabasco y Campeche.

En estas entidades la pérdida de empleos petroleros provocó en cascada igual que miles de empleos se perdieran en otros sectores económicos, y una se cayó en una situación que aún con el apoyo del gobierno federal no fue posible remontar.

Sin embargo, además de la crisis del precio del petróleo el gobierno federal continuó en su intento de rematar a Pemex. La SHCP dejó de transferir recursos a la hoy empresa productiva con el fin de dejarla morir y esperar que los privados entraran en su rescate. Pemex cerró pozos petroleros de forma discrecional y dejó de producir subproductos mediante la refinación que al final se cayó. Todo estaba planeado, pero algo le salió mal el pasado 1 de julio y la situación pronto se revertiría.

El problema ya fue revisado por parte del equipo de transición del presidente electo y se ha traducido en un programa de reactivación energética que pasa por la inversión de 150 mil millones de pesos a partir del próximo año para incrementar la producción de petróleo, rehabilitar las seis refinerías existentes en el país y construir una nueva en el municipio de Paraíso en Tabasco.

Desde la campaña López Obrador señaló que revisaría los contratos firmados al amparo de la reforma. No tendrán problemas aquellos que han jugado limpiamente. No se está en contra de la libre competencia, pero apegadas a Derecho.

El asunto ya fue ratificado y la reforma continuará con un Pemex fortalecido para que pueda competir en mejores condiciones con las demás empresas que lleguen al país.

En este contexto fue que esta semana el Ejecutivo estatal, Arturo Núñez Jiménez, se reunió con representantes de la empresa Ente Nacional de Hidrocarburos (ENI) México, subsidiaria de la compañía italiana productora de energía ENI Internacional, misma que desarrolla trabajos para la extracción de hidrocarburos, principalmente aceite ligero y gas en Paraíso y en la costa de Sánchez Magallanes, en Cárdenas.

Esta empresa fue de las ganadoras de las rondas energéticas realizadas, la cual anunció que invertirá unos 7 mil 496 millones de dólares en la entidad en los próximos 22 años. Ya no le tocará a la actual administración ver los beneficios de estos proyectos petroleros, pero eso no impide ofrecer todo el apoyo para que este recurso se aplique en la entidad y en beneficio de los tabasqueños.

Esta es una de las primeras inversiones que llegan a la entidad como producto de la reforma energética. Le tocará a la siguiente administración estatal y federal verificar que las promesas que se hicieron durante los meses previos a su aprobación aterricen en la entidad donde se extrae la mayor parte del crudo mexicano.

Haberes
El gobernador electo, Adán Augusto López Hernández, dijo que gobernará con los mejores cuadros, y que buscará que se cumpla al pueblo para no defraudar la confianza que pusieron en él, y sobre todo en el partido Morena. Es una afirmación compartida el hecho de que Tabasco estará en la mira no sólo de la opinión pública nacional sino también del Presidente de la República. Hay mucho en juego.