Entre ataque y algunas promesas, iniciaron campaña presidenciables

José Martínez
El pasado 30 de marzo arrancaron de manera oficial las campañas políticas del proceso federal que concluirá el próximo 1 de julio, con la renovación de los actuales diputados federales, a los senadores y al Presidente de la República. Por lo especial de estas fechas para la religión que profesan muchos mexicanos, incluyendo a muchos de los candidatos, algunas prorrogaron el inicio de su campaña para los primeros días del mes de abril.

No fue el caso del candidato de la coalición por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, quien desde las cero horas del 30 de marzo arrancó con una serie de trabajos con jóvenes mediante para la búsqueda de soluciones a problemas nacionales desde su óptica. El panista prometió que las propuestas presentadas por jóvenes serán incluidos en su programa de trabajo en caso de ganar. Anaya señaló que fortalecerá durante su gobierno el combate a la corrupción y la pobreza.

Margarita Zavala, la única independiente que aparecerá en las boletas del 1 de julio, arrancó su campaña en el Ángel de la Independencia en la ciudad de México, en los primeros minutos que lo permitía el calendario electoral. Esto mientras los consejeros del INE se enfrascaban en el análisis de las irregularidades encontradas en el proceso de la selección de las firmas ciudadanas, por la esposa de Felipe Calderón.

El pleno del órgano electoral federal aprobó que aparezca en la boleta, sin embargo, se encuentra bajo un proceso de investigación a raíz de estas irregularidades, lo que le puede traer consecuencias a futuro.

Los que decidieron empezar su promoción en el primer día de abril fue José Antonio Meade, candidato de la coalición Todos por México, quien inició la difusión de sus propuestas en el estado de Yucatán, donde se hizo compromisos con la ciudadanía y de paso lanzó algunos ataques contra los otros candidatos.

Se comprometió que si el voto ciudadano le favorece será el primer presidente sin fuero. El otro tema de sus compromisos en la Península fue el relacionado con la inseguridad.

El otro político que decidió abrir el 1 de abril fue Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición Juntos Haremos Historia, quien se fue al otro extremo del país, y arrancó formalmente su campaña en la ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, en Chihuahua, donde no paró de hacer alusión a sus compromisos con las personas que por necesidad se ven obligadas a cruzar la frontera en la búsqueda de un futuro mejor. Ratificó que el tema central de su gobierno, en caso de ganar, será el combate frontal a la corrupción y la impunidad.

De esta manera es que iniciaron sus campañas los cuatro candidatos a la presidencia de la República, los cuales han prometido que estará llena de propuestas y sin descalificaciones. Algo difícil de creer ante las pasiones que levantan los procesos en nuestro país.

Esta etapa que culminará el próximo 28 de junio seguirá un periodo de reflexión previo a la jornada del 1 de julio, donde los mexicanos decidirán el futuro de este país.

Haberes
MIENTRAS el Obispo de la entidad pidió que los candidatos hagan propuestas, la comunidad evangélica les solicitó que protejan a las familias y a la vida. A ver a quién les hacen caso.