Corte de Caja
La carta de intelectuales, un foco rojo para el gobierno federal José Martínez El conflicto se intensificó la semana pasada cuando la Procuraduría General de la República (PGR) difundió un video en la que se aprecia a Ricardo Anaya en sus instalaciones solicitando se le informe si existe alguna investigación de carácter delictivo en su […]
7 de marzo de 2018

La carta de intelectuales, un foco rojo para el gobierno federal

José Martínez
El conflicto se intensificó la semana pasada cuando la Procuraduría General de la República (PGR) difundió un video en la que se aprecia a Ricardo Anaya en sus instalaciones solicitando se le informe si existe alguna investigación de carácter delictivo en su contra, después de supuestas investigaciones iniciadas en octubre del año pasado.

En dicho video se escucha un insulto contra uno de los agentes investigadores, el cual fue atribuido al candidato panista. Posteriormente se supo que no fue él sino uno de los que lo acompañaban en ese momento. Por lo menos, Diego Fernández se echó la culpa.

Los panistas sostienen que la difusión del video forma parte de una estrategia que busca reducir las preferencias electorales del precandidato a la Presidencia de la república de la coalición Por México al Frente (PAN-PRD-MC), exhibirlo, dejarlo mal ante la sociedad y de esta manera posicionar al candidato priista José Antonio Meade. Es guerra sucia, sostienen. El PRI lo niega e insiste en que Anaya aclare sus negocios millonarios.

Ante ello, el domingo 4 de marzo un grupo de académicos, intelectuales y activistas mexicanos publicaron en la revista Nexos y en Letras Libres una carta abierta al presidente Enrique Peña Nieto, donde condenan lo que llaman el uso faccioso de la PGR para perjudicar a Ricardo Anaya.

Los firmantes exhortaron a las autoridades investigadoras el proceder contra el aspirante presidencial, si de verdad tienen pruebas. De lo contrario, agregan, usar a la PGR para perseguir a un líder de la oposición colocaría a México junto a países con regímenes autoritarios y democracias totalmente disfuncionales.

Las personas que firmaron la carta tienen filiaciones políticas diversas y plurales, explican, aunque hay también abiertos simpatizantes de Anaya.

Los suscribientes del documento público remataron diciendo: “La decisión de quién será el próximo presidente de México corresponde exclusivamente a las y los ciudadanos mexicanos”.

Esta demanda fue ratificada por el propio Ricardo Anaya horas después del mismo domingo, en la que en rueda de prensa solicito de forma directa al presidente Enrique Peña Nieto sacar las manos del proceso electoral y dejara que el pueblo de México elija en completa libertad.

El aludido Peña Nieto salió a decir el lunes que él no se meterá en la elección, rechazando el uso discrecional de las instituciones del estado como la PGR para trata de inclinar la balanza en contra de algún candidato. El mismo encargado de la PGR, porque no hay titular, aseguró que no tienen ningún elemento para actuar en contra del de Querétaro. Aunque ya el daño en términos de propaganda está hecho y la duda sembrada.

Todo esto ocurre mientras el árbitro electoral federal, el INE, finge demencia y deja hacer, deja pasar. Los focos rojos están encendidos, mientras Andrés Manuel López Obrador pide que los contendientes dejen sus problemas personales y le entren a la contienda con responsabilidad. Las campañas han dado un giro inesperado: uno de los protagonistas, AMLO, que fue señalado reiteradamente como antisistema, ahora es el que llama a preservar las instituciones. Vueltas de la política.

Haberes
DE ACUERDO a una encuesta difundida ayer, así van los números por la alcaldía de Comalcalco: Lorena Méndez, de Morena, 35%; Neyda García, del PRD, 22%; y Jaime Hernández, del PRI, 10%. Las campañas formales no han comenzado, y los candidatos sumarán los positivos y negativos de sus partidos, así como la calificación que tengan en su paso por la función pública. Todos han sido puestos a prueba en el poder.

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