PRD, contra el riesgo de la ruptura, el trabajo de base

José Martínez
A unos días de que el PRD votó por un nuevo dirigente interino, las siglas del partido en el gobierno se volvieron a unir. Hoy se habla de su espíritu renovador y de tener fuerza propia, la cual es el resultado de sanar algunas heridas entre sus militantes. La llamada “operación cicatriz”.

Darvin González Ballina. Fundador de ese partido, está en la búsqueda del cambio del rostro, y una prueba es haber anunciado que en breve tendrá acercamientos con las diferentes corrientes ideológicas, además de los presidentes municipales y diputados; pero antes hará una revisión a fondo de las finanzas que dejó Candelario Pérez, y comprobar si en verdad hubo excesos.

Adelantó que buscará a Juan Manuel Fócil para iniciar una plática con el fin de conciliar y construir el Frente Ciudadano en la entidad rumbo a las elecciones. Aunque Fócil se adelantó, y dijo que no escuchará ni atenderá a la nueva dirigencia, algo que no habla bien del diputado local, porque si en su discurso se refiere a la reconstrucción de Tabasco es necesario entender la estrategia de Darvin González, no irse por la tangente ni abrir una ruta del resentimiento.

El reloj político ya marcó fechas que deben cumplirse como son las precampañas y las campañas, por su parte las manecillas recorren el segundero sin que haya tiempo para decidir o jugar a grupos de presión.

Darvin sabe que tiene pocas horas, y la fórmula para avanzar es el diálogo, el cual servirá de combustible para llegar y convencer a quienes en verdad quieren ver bien al PRD.

Que no se tome tampoco como una especie de evangelización, porque igual se conocen y saben quién está en contra de los ideales de un partido que vive la crisis del poder. También debe estar atento a los movimientos perversos.

No se diga tampoco que es el último estirón, pero sí tal vez una gran oportunidad para reencontrar al PRD, y darle el brío que perdió desde hace varios años, a pesar de llegar al gobierno, ¿o por eso?

Mientras el PRI, Morena, PAN y el PVEM tratan de reacomodarse en las arenas movedizas, el PRD debe saber que su proceso está por iniciar para dar una contienda de altura.

La histórica izquierda necesita reforzarse, ir al terreno de la base, como bien anunciaba su dirigente; buscar a los olvidados del partido para darles su lugar, y pasarlos a las filas del ejército que responderá desde cualquier trinchera.

Darvin sostuvo que hablará hasta con el “Diablo” si es necesario, porque el templo debe edificarse. El mensaje es claro: habrá voz para todos, siempre y cuando quieran escuchar.

El dirigente advertía que por el momento no se tiene determinado ningún cambio al interior del Comité Ejecutivo Estatal, sin embargo, se realizarán remociones contra quienes incumplieron con sus funciones o violentaron los estatutos.

Lo que significa que tampoco habrá mano blanda, sobre todo para los que piensan llegar y seguir actuando como antes.

El reacomodo de fuerzas debe continuar, demostrar que ya no se puede seguir avasallando, sobre todo en las candidaturas. Se anuncia “piso parejo”, y es una fórmula que dará certeza y confianza a los participantes, y una buena lección para la militancia.