Atención a adultos mayores, un acto de justicia y el Centro Gerontológico

José Martínez
El nueve de noviembre de 2012 el entonces gobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo, inauguró el Centro Gerontológico del estado. Una obra que operaría como “Casa de Día”, en la que se daría el cuidado y entretenimiento diurno a adultos mayores. Tendría una capacidad para albergar de manera temporal a 450 personas mayores, mientras sus familiares cumplían con sus obligaciones laborales.

El inmueble contaba en los planos arquitectónicos con una infraestructura bioclimática, única a nivel nacional. Su construcción se realizó con una inversión de 82.5 millones de pesos, según consignaron los medios de comunicación en ese entonces. En el lugar se ofrecerían áreas de rehabilitación, terapia, laboratorio, atención médica geriátrica, nutrición, entretenimiento y piscinas.

La inauguración ocurrió a 41 días de dejar el cargo de gobernador Granier, y se desconocía qué había sido de dicho inmueble posteriormente. Una vez tomada las riendas la actual administración se evidenció que lo que se había inauguró en noviembre del año 2012 era un edificio bonito, pero inoperante. Algo así como un elefante blanco.

Carecía de equipo médico, personal especializado; su infraestructura era defectuosa, sin agua corriente, sin electricidad, con áreas inconclusas donde también había humedad y filtraciones. En el área de rayos X, no solamente se carecía de equipo, sino que estaba prácticamente inundada por las filtraciones. El laboratorio se encontró sin ningún equipamiento, y hasta en la biblioteca los estantes estaban vacíos, no había ningún libro, solamente unos cuantos juegos de mesa.

La obra en esas condiciones fue calificada como una “simulación”. Aunque estaba el proyecto para atender a 450 adultos mayores se confirmó que solamente 25 personas estaban inscritas como residentes, de los cuales 15 acudían al inmueble por los programas que ahí se implementaban, ante la falta de personal que se requiere para que funcione a toda su capacidad.

Esta situación llevó –incluso-, a que el Centro cerrara por un tiempo; sobre todo por las deficiencias que presentaba. Por ese motivo se llevaron a cabo las demandas necesarias en las instancias pertinentes ante la burla que fue objeto la sociedad tabasqueña en nombre de un grupo de población sumamente vulnerable.

El gobierno del estado, ya encabezado por Arturo Núñez, se vio obligado a gestionar los recursos necesarios para reabrir este espacio tan demandado por cientos de familias, que tienen algún familiar mayor que requiera la atención especializada. Con el entendido de que no es un asilo, los familiares contarán un apoyo en el cumplimiento de responsabilidades de los cuidados de sus familiares mayores, los que regresan con ellos a casa.

Ayer se formalizó la reapertura del Centro Gerontológico, con la presencia del gobernador Núñez y su esposa. Con ello que se dio cumplimiento al compromiso de reactivar este inmueble y ofrecer a las personas de la tercera edad espacios adecuados que les permitan encontrar formas de realización y entretenimiento. Para su rehabilitación se requirió de una inversión de 4.5 millones de pesos, aunque la mejor inversión es dar una vida digna a estas personas.

Haberes
JUAN Manuel Fócil se anda paseando en diversos medios promoviendo una iniciativa para perseguir de oficio el delito de robo de vehículo. El diputado se quiere hacer notar, porque sabe que ya está el momento electoral, ¿por qué esperó tanto tiempo? Lo que no cabe duda es que sabe calcular, no improvisa.