Corte de Caja
Contra las agresiones a comunicadores; el derecho a estar informados José Martínez La información es poder. Al menos en México es una frase que se va depositando en el pasado, porque ahora representa en ciertos casos miedo para quien escribe y denuncia, utilizando como herramienta los medios de comunicación. ¿Debemos estar informados? ¿Vale la pena […]
4 de abril de 2017

Contra las agresiones a comunicadores; el derecho a estar informados

José Martínez
La información es poder. Al menos en México es una frase que se va depositando en el pasado, porque ahora representa en ciertos casos miedo para quien escribe y denuncia, utilizando como herramienta los medios de comunicación.

¿Debemos estar informados? ¿Vale la pena informar? En México es considerado peligroso, a tal grado que somos el tercer país después de Afganistán y Siria con más comunicadores asesinados, amenazados o heridos. Así lo sustenta un informe de Reporteros Sin Fronteras.

Un ejemplo es el estado de Veracruz, donde más violencia existe contra los periodistas: al menos unos de 25 homicidios en el gobierno de Javier Duarte, el cual acaba de terminar.

Lo más reciente, y que molestó a la sociedad, y pronunció un ¡ya basta!, fue el crimen contra la periodista Miroslava Breach, corresponsal del diario La Jornada, la mañana del jueves 23 de marzo en Chihuahua. Hombres armados que le dispararon cuando salía de su domicilio, a plena luz del día. Este hecho obligó a cerrar el diario Norte.

Aunque el cuadro estadístico se complementaba, solo en el tercer mes de este año, con dos asesinatos más, el de Cecilio Pineda, en Guerrero y Ricardo Monlui, en Veracruz.

En el 2016, representantes de la ONU indicaron que la situación de violencia en contra del ejercicio periodístico fue inadmisible.

Son riesgos que deben eliminarse, sobre todo las agresiones, ya sean verbales o físicas. El corte del año pasado fue de 12 periodistas asesinados y 88 agredidos. Lo peor es que no se castigaron, la investigación fue a medias, a tal grado que llegaron a encarpetarse.

Otro caso de gran visibilidad e indignación social fue el de Regina Martínez, en 2012, igual corresponsal de Proceso, así como Rubén Espinoza en 2015. Las agresiones fueron una constante, a pesar de las protestas ciudadanas.

La libertad de expresión se convirtió en un blanco fácil, vulnerable, endeble. Se ha señalado como presuntos responsables a los funcionarios públicos; estatales, federales, policías, militares. Hay evidentemente también grupos delincuenciales de todo tipo.

Reporteros Sin Fronteras ha declarado que a pesar de que existe el Mecanismo de Protección a periodistas y defensores de derechos humanos, de la Secretaría de Gobernación, no se ha logrado erradicar la impunidad.

Refirió que esta práctica “instalada en este país está enquistada”, y si no se investiga y se detiene a los responsables de los asesinatos de periodistas no se van a detener las agresiones, así esté fortalecido el Mecanismo de Protección.

Aquí en Tabasco, en la legislatura pasada se analizó crear una ley para proteger a los periodistas. Se realizaron mesas de análisis, pero sólo quedó en el sueño de la entonces diputada del Panal, Aracely Quevedo -su promotora- quien la usó como bandera en la búsqueda de la alcaldía de Cunduacán. Al final, al ver que no tendría éxito, mejor abandonó el tema de dicha iniciativa.

Haberes
IMPORTANTE reconocimiento al esfuerzo de los gobiernos estatales para impulsar la reforma educativa y el nuevo modelo hizo el titular de la SEP, Aurelio Nuño, durante su visita a Tabasco. Se reunió con el gobernador Arturo Núñez y el secretario Ángel Solís, así como con representantes de las entidades del sureste.

PERREDISTAS de la vieja guardia se dejaron ver. De la mano de Pablo Rodríguez Bonfil, Dorilián Díaz y Auldárico Hernández, arrancaron con una nueva corriente llamada “Iniciativa Galileo”, una pequeña ala del PRD, dijeron. Lo negativo: en esa corriente arrastraron a Humberto de los Santos Bertruy

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