Ahorros, programas sociales, y desarrollo para Tabasco
José Martínez
Los anuncios que viene dando a conocer Javier May Rodríguez en sus recorridos de agradecimiento se deben tomar muy en serio.
Desaparecer dos secretarías para tener ahorros en esta administración con el fin de continuar con los programas sociales, pero de manera local, será de gran beneficio.
Uno, es ayudar a los grupos vulnerables con beneficios que anunció en campaña, y dos, es no caer en deudas.
Por ello, también señaló que se bajará el sueldo en comparación con lo que aún gana Carlos Manuel Merino Campos. También se buscará adelgazar la burocracia, y los ajustes que tengan que hacerse será con los funcionarios de primer nivel y no con la base trabajadora, al tiempo que comprometió respetar la equidad de género.
Los ajustes son necesarios. Javier May viene pensando en sacar a Tabasco de este atraso en el que se encuentra.
Para eso es necesario apretar, no mirar hacia atrás ni culpar a nadie, porque no tiene caso perder el tiempo en eso, al contrario, May está mirando hacia el futuro, moviendo piezas con el fin de hacer las mejores jugadas en este tablero de ajedrez político y social.
Javier May viene acumulando esfuerzos desde hace varios años. Su capacidad se mide en los lugares en donde ha estado como funcionario, y donde cumplió de manera responsable y satisfactoria.
A cada momento todo evoluciona. Y Tabasco no puede quedarse más en el atraso. Es importante que las condiciones empiecen a darse, pero no se trata sólo de la suerte sino de trabajar y trabajar para concretar los proyectos.
A ras de suelo, ha dicho Javier May, de esa forma serán sus recorridos con funcionarios en los municipios, nada de escritorios sino de territorios. Las ideas son claras. Quienes estén al frente de alguna secretaría tendrán una gran responsabilidad que cumplir, porque hasta donde sabemos, vendrán evaluaciones.
No quieren entender
La oposición sigue sin entender qué fue lo que le pasó el dos de junio y en dónde es gobierno, como Guanajuato, sigue actuando de manera arbitraria y antidemocrática.
No han querido entender, se por ignorancia y ceguera o por simple negación, que e pueblo ya no quiere a los políticos que solo ven los cargos como la posibilidad de hacer negocio o enriquecerse.
Cuántos escándalos de corrupción de los gobiernos del PRI y del PAN no han sido denunciados sin que nadie sea castigado.
Salen a defenderlos con el socorrido argumento de que sufren persecución política de parte de la 4T.
La semana pasada nos enteramos de dos hechos lamentables, que han merecido la condena social.
Los dos asuntos tienen que ver con los gobiernos del PAN en Guanajuato y en Chihuahua.
En el primer caso, nos enteramos que el fiscal de esa entidad, Carlos Samarripa, quien lleva en el cargo más de 15 años, a pesar de que Guanajuato es el estado más violento del país, se auto asignó una pensión muy generosa ahora que se retirará del cargo.
Lo hizo en complicidad con el gobernador Diego Sinhue Rodriguez, modificó el reglamento interno de la Fiscalía de Guanajuato, sin consultar al Congreso, para aumentar 33 por ciento su pensión ahora que se retire.
Y cómo si eso fuera poco, el mandatario panista propuso a la esposa de Samarripa, Elvia Oralia del Pilar Durán Isais, como magistrada del Tribunal de Justicia Administrativa de estado.
No solo premian su ineptitud como fiscal y su presunta vinculación con el crimen organizado, sino que además le permiten blindarse desde ese órgano jurisdiccional ante cualquier eventual acusación en su contra.
En Chihuahua , la gobernadora María Eugenia Campos le condonó una deuda de 43 millones de pesos al exgobernador César Duarte, preso por corrupción y malos manejos, por impuestos que adeudaba una empresa familiar, misma que fue utilizada para robarse el dinero de los chihuahuenses.
Además, el Poder Judicial de esa entidad, controlada por el PAN, le permitió seguir en prisión domiciliaria el proceso penal a pesar que la corrupción es un delito grave.
Y todavía se pregunta el PAN por qué el pueblo le ha dado la espalda.
Haberes
Margarita Espinosa Armengol, magistrada presidenta del Tribunal Electoral de Tabasco (TET), afirmó que en el órgano jurisdiccional no se politiza la justicia y llamó a los partidos políticos a mantener la serenidad en medio de las impugnaciones electorales. Espinosa Armengol destacó que ha estado siguiendo las declaraciones y manifestaciones de los actores políticos a través de los medios de comunicación, y pidió a todas las partes involucradas en los actos de impugnación que se serenaran.