Corte de caja
Migrantes, cada país con sus problemas José Martínez Las caravanas migrantes que vienen de Centroamérica y se estacionan en Tapachula, Chiapas, ya están ocasionando serios problemas. Algunos estarán a favor de que se les dé asilo a estas personas que provienen en su mayoría del país de Haití, un lugar donde prevalecen problemas como la […]
6 de septiembre de 2021

Migrantes, cada país con sus problemas

José Martínez
Las caravanas migrantes que vienen de Centroamérica y se estacionan en Tapachula, Chiapas, ya están ocasionando serios problemas.

Algunos estarán a favor de que se les dé asilo a estas personas que provienen en su mayoría del país de Haití, un lugar donde prevalecen problemas como la pobreza extrema, falta de hospitales, un elevado índice de trabajo infantil, abusos sexuales, y sin derecho al agua.

Una radiografía nada fácil, lo cual obliga a su gente a salir de esa zona. Sin embargo, le toca a México casi resolver esos temas, porque los migrantes al llegar exigen de inmediato asilo.

Publicaciones de los diarios Reforma y El Universal, principalmente, hacen referencia del problema, y destacan “violencia” y “racismo” en el sur. Esa parte, desleal, sobre todo, es para tratar de culpar al gobierno mexicano de la crisis en Haití.

Desde sus páginas, estos diarios hacen una radiografía en contra, colocándose como una balsa salvadora para estas personas, bajo la exigencia de que México tiene la responsabilidad de atenderlos tanto en salud, alimentación y trabajo.

Además, se han sumado a esta ola migrantes de Venezuela, Cuba, Honduras, El Salvador y Nicaragua, se hacen llamar la “cuarta caravana”, y de acuerdo a sus objetivos viajan hacia Estados Unidos, pero desde que inició la pandemia, un buen número se quedó en la zona norte del país esperando una visa, la cual nunca llegó.

El resbalón panista
Tienen derecho, claro, a asumir la ideología que quieran; ser oposición bajo cualquier bandera. Incluso la de ultraderecha católica y casi fascista. De los ciudadanos depende combatirlos con argumentos y movilizaciones. Queremos democracia no fanatismos.

Pero el Partido Acción Nacional dio un grave resbalón para sus propósitos de convertirse en un partido de propuestas y con apoyo de la población. No pudieron contener a sus representantes en el Senado, no tienen liderazgos, no tienen disciplina de partido…¿cómo quieren gobernar si no se gobiernan a sí mismos? Ya vimos los resultados cuando esto sucede.

Un grupo de quince senadores del PAN encabezados por su líder de apellido Rementería o algos así, trajo a México a un señor Abascal que encabeza al partido de más ultraderecha en España. Porque según dijeron nos quieres proteger del comunismo. Muy atrasados están en noticias.

Ahora el PAN trata de deslindarse de Rementería y sus allegados, pero el affaire Abascal sirvió para recordar que el PAN tiene un ingrediente ultraconservador y reaccionario del que debe sacudirse si quiere gobernar un país plural. México es una nación desgraciadamente desigual y con una mayoría marginada, lo que necesita, como bien dijo el senador Madero (PAN) es una propuesta civilizada y no retrógrada como la que representa Abascal y su grupo Vox, que algo nos recuerda a Fox.

Tiene poco, muy poco tiempo, el PAN para convencer que es una propuesta civilizada y no de quienes quisieran revivir la Santa Inquisición y a los kukuxlanes gringos. Hay, me parece, gente que piensa entre los panistas y que no se pueden dejar arrastrar por sus demonios internos. Ya pactaron con el PRI, pero pactar con Vox es dar un salto al abismo.

México al igual que otros países tiene sus problemas, y sería injusto albergar más, sobre todo con una pandemia a cuesta que golpea de manera natural en la economía y educación.

No se trata sólo de abrirles las puertas e invitarlos a pasar. Son horas de proyectos para saber qué hacer con un sinnúmero de gente que trae hambre y miedo por lo sucedido en sus países de origen.

Esta situación de la migración es un marco referencial de lo mal que están en Centroamérica. Y al querer llegar por México, lo primero que presentan es la bandera de los derechos humanos.

Se reconoce que existe el libre tránsito, pero quedarse a vivir en México y sin papeles lleva a otra connotación: la saturación de habitantes.

La convivencia con los habitantes de Chiapas, por ejemplo, ya es tensa. Las calles se ven repletas de personas que no son del país, lo que genera una psicosis, sobre todo por denotar la delincuencia.

México se debe mostrar ajenos a las políticas públicas mal implementadas en aquellas partes del continente. Nada tiene que explicar ni mucho menos sentirse culpable. Cada gobierno con sus problemas.

Haberes
En sesión solemne en el Congreso de Tabasco, quedó instalada formalmente la sexagésima cuarta legislatura y abierto el primer periodo ordinario de sesiones del primer año de ejercicio constitucional. Atentos para saber cómo responden.

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