Ciudad de México
Agencias
Ante la situación que impera en el partido Morena, dejó en claro que no se meterá en el proceso interno de ese instituto político y de ningún otro. “No me corresponde. Partido, como su nombre lo indica es una parte; gobierno es todo. Yo tengo la responsabilidad de gobernar para todos los mexicanos”.
Insistió, “yo no voy a traicionar al pueblo, la gente votó por un cambio, no para seguir haciendo lo mismo, la gente votó para que haya democracia”-
Y nada de simular, nada de que yo les esté diciendo aquí que no me voy a meter y yo me esté reuniendo con los dirigentes. Ese doble discurso, esa doble moral que caracteriza a los conservadores.
“Entonces, a todos los partidos les deseo que les vaya muy bien, que resuelvan sus diferencias de manera democrática y también que se erradiquen las prácticas antidemocráticas. Va a quedar establecida la democracia”, apuntó.
Se va a acabar el fraude electoral, todo eso que padecimos, todo eso que caracterizó al régimen antidemocrático que malgobernó a México por décadas, la compra del voto, el tráfico con la pobreza de la gente, la falsificación de actas, el relleno de urnas, el uso del presupuesto para favorecer a candidatos a partidos, la parcialidad de las autoridades electorales. Todo eso era una vergüenza para México.
Países más pequeños que el nuestro y con una democracia casi perfecta, incapaces de cometer un fraude.
No caer en provocaciones
Sobre los disturbios en la Rectoría de la UNAM, pidió a las autoridades no caer en provocaciones.
“Reprobamos todo lo que signifique el uso de la fuerza y recomendamos no caer en provocaciones, en la trampa de la confrontación y la violencia”, apuntó.
El mandatario celebró que de manera democrática Enrique Graue fue elegido para un nuevo periodo como rector de la Universidad Nacional Autónoma de México. Le deseó éxito en su gestión y resaltó que el gobierno federal trabaja de manera coordinada con la institución y mantiene absoluto respeto a su autonomía.