“Chiquito se les va a hacer el
mundo para esconderse a la gente
que tenga responsabilidades”
Manuel Ordóñez Galán

Enrique Muñoz González
cayuco7@hotmail.com
Dentro de la podredumbre que va saliendo de lo  dejado por el gobierno saliente, van apareciendo nombres de personajes con responsabilidad en el brutal saqueo al presupuesto estatal, como son los hermanos: Carlos Alberto y José Francisco Vega Celorio; el primero, fungió como Subdirector de Administración, hoy es alcalde de Tenosique y el otro, era el director de la Junta Estatal de Caminos (JEC).

Ambos, cada uno por su cuenta, le metieron mano al presupuesto, pero dejaron huella, y por eso van a aplicarles la justicia, pues aunque muchos lo pongan en duda, en este Gobierno no habrá impunidad para nadie, sin importar el cargo ejercido o la posición política en la que se encuentren actualmente, como es el caso de Carlos Alberto Vega, quien no por ser alcalde, considere no le harán pagar por lo que hizo.

Carlos Alberto debería de separarse del cargo para enfrentar las denuncias de irregularidades en su contra, no sólo por los gastos en la Quinta Grijalva, sino también por la adquisición de las bicicletas y computadoras, de las cuales obtuvo ventajosas ganancias; sino es por las buenas, será por las denuncias, por lo cual deberá renunciar a la alcaldía, donde se tendrá que nombrar un Concejo Político Municipal.

Quien también tiene advertencia de pagar con cárcel el latrocinio cometido es, José Francisco Vega, pues de acuerdo a  las declaraciones emitidas  recientemente por Manuel Ordóñez Galán, se enriqueció como director de la Junta Estatal de Caminos, porque todas las obras fueron de baja calidad, simulando los concursos para beneficiarse, así como la relación con proveedores, haciendo grandes negocios.

Vayamos por partes, Carlos Alberto Vega llegó al gobierno granierista con un modesto modo de vivir, hoy es millonario, hizo el negocio de su vida, con la anuencia del gobernador, al ser el receptor de todas las donaciones que llegaron producto de la inundación del 2007. Con manejo discreto, perfil bajo, dio el visto bueno y entregó recursos etiquetados a la dependencia a su cargo para pagos adicionales a la residencia oficial.

Hoy con fuero constitucional, Vega Celorio, ya cuenta con solicitud de juicio político en su contra, lo reveló recientemente la diputada Rosalinda López Hernández; hoy se sabe el presupuesto de la Subsecretaría de Administración osciló en 225 millones de pesos anuales, en una dependencia donde se maneja sólo el registro de la plantilla de burócratas, el alquiler de equipo y muebles, y el mantenimiento del Centro de Convenciones, entre otras partidas.

Beto Vega, se encargó de cubrir los gastos de servicios personales, energía eléctrica y gasolina para evitar se etiquetara y exhibiera el costo real de la operatividad de la Quinta Grijalva; hizo crecer la nómina como lo denunció el diputado del PRD, Noé Herrera Torruco, al dar a conocer cifras escalofriantes del aumento de la burocracia, se pasó de 42 mil trabajadores a 83 mil 402 burócratas.

Es obvio, ese incremento de la burocracia lo representaron los aviadores incrustados en todas las dependencias, para favorecer a amigos, amiguitos y amiguitas quienes sólo acudían a las oficinas a cobrar abultadas cantidades de dinero a cambio de emitir su voto a favor del PRI. Con estas acciones, obvio trabajó a su favor en Tenosique para obtener la alcaldía, a punto de perderla, ante el descubrimiento de la corrupción que lo enloda.

De Francisco Vega Celorio, director de la JEC, se puede señalar adicional a lo que acusó Manuel Ordóñez, que traficaba con el asfalto usado para remendar caminos; hay todo un entramado en lo referente a la Planta de Emulsiones Asfálticas que dejó ganancias ilícitas de millones de pesos para el ex funcionario. De todo esto hay documentos donde se confirma la voracidad para robarse el dinero,  y no hacer las obras correspondientes.

Hay indicios de haberse hecho dobla facturación con la contabilidad de esa planta de emulsiones, para modificar conceptos; según informes recabados, se publica una nota informativa donde Francisco Vega Celorio, solicita la intervención de José Saiz Pineda, Secretario de Finanzas y Roger Pérez Evoli, Secretario de Contraloría, se giren instrucciones para SUPRIMIR del Organigrama de la JEC con “alguna” fecha de 2010 la planta de emulsiones. Dado que, a decir de José Francisco Vega Celorio, la planta asfáltica no labora desde 2010 por falta de presupuesto.

Hay mucha tela de donde cortar con la corrupción cometida por los hermanos Vega Celorio; ojalá el Congreso local haga lo conducente, y al igual la Contraloría, para que haya sanciones enérgicas, se les obligue a resarcir el daño patrimonial, además se les castigue y queden inhabilitados para ejercer actividades en el servicio público. No son confiables.

La Piragua
Tan sólo es apenas el principio. En las denuncias que se vayan conociendo de desvío de recursos, quien va a tener mucho trabajo es la Secretaria de la Contraloría, Patricia Jiménez Oropeza, quien asegura no es necesario contratar despachos externos para sacar el trabajo que tiene por delante, en caso de hacerlo, informe a quienes va a contratar, por sus nexos con las hermanas López Hernández,  y así evitar suspicacias.

Ni la fiesta del Pochó en Tenosique servirá a Carlos Vega Celorio para minimizar los señalamientos en su contra por corrupto, porque la gente se divierte conforme a sus tradiciones sin mezclar asuntos políticos en las festividades; tampoco le servirá el fuero en su calidad de alcalde, porque tendrá que solicitar licencia para responder ante la ley por la denuncia que se prepara en su contra.