El “aplausómetro” del 2 de julio

Jorge Núñez
jorgenunez63@hotmail.com
La refinería Olmeca, una de las obras insignia del actual gobierno, será inaugurada este 2 de julio, pero según lo expresado por Obrador sólo iniciará con periodo de pruebas, puesto que “hay que armonizar todo” para obtener el combustible, por lo que aseguró que “va a llevar tiempo”. Será también un acto político para medir la popularidad de las ‘corcholatas’ nacionales y locales que buscan, por un lado, la candidatura presidencial y por el otro la gubernatura de Tabasco.

De acuerdo con una nota informativa publicada en el portal de Infobae, el presidente ha hablado con claridad para evitar malos entendidos: “La verdad es que va iniciar un periodo de pruebas. Vamos a inaugurar la refinería, pero a sabiendas de que se inicia un proceso (…) va llevar tiempo, pero la parte constructiva termina este año”-

A la par, negó que dicha fase de prueba fuera a tomar dos años y aseguró que en 2023 el país dejaría de comprar gasolina a otros países. “El año próximo ya dejamos de comparar las gasolinas, y necesitamos esa planta, porque nos va a dar alrededor de 150 mil barriles diarios de gasolina”. El 1 de mayo, ante la conmemoración del Día del Trabajo, el mandatario visitó la Refinería Olmeca, ubicada en Dos Bocas. Ahí fue arropado por el gobernador Carlos Manuel Merino entre vítores en la obra edificada en su estado natal y en la que hay más de 35 mil trabajadores laborando.

De acuerdo con el gobierno federal, la refinería tendrá la capacidad de procesar 340 mil barriles de petróleo crudo por día. Y de acuerdo con lo expresado por la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle García, la refinería se construye “en tiempo récord”. Bloomberg asegura que el costo total del proyecto será de alrededor de 14 mil 500 millones de dólares (superior al estimado por Pemex de 9 mil 800 millones).

A la par de lo técnico y administrativo, la inauguración del 2 de julio será un acto político de gran importancia. Fuentes dignas de crédito hablaron de la muy factible presencia de los precandidatos presidenciales: Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto. Igual estarán la mayoría de los aspirantes a la gubernatura: Raúl Ojeda, Manuel Rodríguez, Javier May, Octavio Romero Oropeza, Mario Llergo, Mónica Fernández Balboa y César Burelo.

En vista del gran número de personas que habrá, entre ellos los miles de trabajadores, el acto servirá también para medir la fuerza de los precandidatos. El ‘aplausómetro’ reflejará de alguna manera el grado de aceptación entre los simpatizantes de Morena. Ya se verá cómo salen las ‘corcholatas’ nacionales y locales de esa especie de termómetro popular frente a los ojos del presidente. Hay expectación y a la vez nerviosismo ante el recibimiento que puedan tener.

: Corta memoria
Gerardo Gaudiano sigue dando recetas sobre cualquier proyecto del gobierno morenista. Antes habló sobre la contaminación de la laguna de Las Ilusiones, desperfectos en el distribuidor vial de avenida Universidad, y ahora habla de un ‘ecocidio’ por la construcción del hospital Rovirosa en el predio cercano a la laguna El Caracol.

Más allá de que las autoridades hayan salido a hablar sobre un plan de rescate integral de la laguna de Las Ilusiones y de la falsedad en la tala de árboles o afectación de la fauna en El Caracol, la opinión pública se sigue preguntado si el diputado federal de Movimiento Ciudadano tiene los méritos para dar lecciones sobre estos temas.

En su paso como alcalde de Centro, todos recuerdan el gran escándalo de corrupción por la renta de vactors y por el suministro de agua sin potabilizar a los habitantes de Villahermosa. Tampoco se olvida su huida de una colonia de la capital tras ser increpado por los vecinos ante el incumplimiento de sus promesas de campaña.

En el ánimo ciudadano hay una pregunta insistente: ¿Por qué critica ahora lo que no hizo como presidente municipal?