Causando erosiones por más de una docena de tramos y ninguna autoridad de los dos municipios no se han preocupado por rehabilitarla totalmente, señalan dirigentes de sectores y organizaciones

Jonuta
José Carlos Jara
Corresponsal
Desde hace más de dos décadas que la vía Jonuta-Frontera se encuentra en la ruina además de que el Usumacinta “la devora” causando erosiones por más de una docena de tramos y ninguna autoridad de los dos municipios no se han preocupado por rehabilitarla totalmente, señalan dirigentes de sectores y organizaciones.
Construida por la empresa Landa y Rubio hace unos veinte años, la magna obra que enlazo en la comunicación terrestre a ambas demarcaciones, es considerada como una de las obras más importantes para el transporte de la zona de los pantanos y que fue inaugurada por el ex presidente de la república Carlos Salinas de Gortari.
En ese sentido el vicepresidente de la CANACO, Enrique Estrada Martínez  manifestó que “los presidentes municipales que hemos tenido por apatía y negligencia no  han preocupado por rehabilitarla las pésimas condiciones en que se encuentra la carretera, diversos tramos están deslavados por los embates de las fuertes corrientes del río Usumacinta, cuyo problema ha tomado dimensiones gigantescas, lo que hasta la fecha amenaza con dejarnos incomunicados “.
Señaló que “nos encontramos parcialmente incomunicados al deslavarse peligrosamente dos tramos de la carretera que sirve de comunicación a más de una docena de localidades rurales de ambos municipios,  los deslaves son el pan de cada día y por donde ronda la muerte y los peticiones y exigencia de que la compongan no tienen eco”.
Crítico que “autoridades de Jonuta y Centla, van y vienen y no se han preocupado por componerla totalmente, ya que es la única carretera para trasladarse, de la infinidad de comunidades que existen a lo largo de la vega del Usumacinta en ambos territorios”.
Mientras tanto que el ex líder del sector popular, Marco Antonio Correa Montejo dijo que  son muchos los puntos que están en pésimas condiciones, pero en lo que respecta a la geografía jonuteca una de las zonas más afectadas por desde hace buen tiempo hasta la fecha y que se recrudeció además de los deslaves a la altura de las rancherías de Ribera Baja primera sección, Francisco J. Mújica y la comunidad indígena de San José donde afortunadamente no ha habido desgracias personales, a eso se suma los tremendos deslaves de la mencionada vía que comunica con la vecina demarcación de Centla.