Locatarios de pescados, mariscos así como aves destazadas del mercado José María Pino Suárez, buscan no incrementar el precio de sus productos, y con ello, evitar dañar el bolsillo de los consumidores, además tener ganancias ante la crisis que se vive.
En un recorrido que se realizó al interior de esta central de abastos, en un día común, donde la mayoría de los tabasqueños realizan sus compras para toda la semana, locatarios de estos dos productos, que son altamente demandados por la sociedad, señalaron que buscan evitar una alza indiscriminada en el precio final, pues evidentemente, esto les puede afectar a su economía, como la de los usuarios.
Felipa Hernández, locataria de la venta de gallinas y pollos, dijo, que se ha buscado evitar un incremento desmedido, pues hace algunas semanas, el producto estaba entre 150 y 160, ahora puede llegar hasta 200, pero en algunos casos los locatarios lo están vendiendo en 170 y 180, ello para no afectar a sus clientes.
Luis Ruiz Sandoval Frade
Rumbo Nuevo