La llegada del mexicano al Nápoles entusiasma a los fanáticos del club italiano, que ven en la figura del azteca un nuevo futbolista al que idolatrar

Nápoles, Italia
Agencias
Fin a una de las novelas del verano. Hirving Lozano aterrizó en Roma en vuelo privado, este miércoles pasará reconocimiento médico, y está previsto que el jueves sea presentado como nuevo jugador del Nápoles.
Eso sí, no ha sido fácil traer al mexicano a la Serie A. Ya en enero el conjunto dirigido por Carlo Ancelotti se interesó por el fichaje del “Chucky”, pero las pretensiones del PSV eran demasiado elevadas para los italianos. Por lo que tanto como el técnico italiano -el mexicano es una de sus debilidades-, como el presidente Aurelio De Laurentiis, decidieron emplazar el fichaje al periodo de fichajes de verano.
Y por fin llegó el momento. Cuando parecía que James Rodríguez sería la estrella del Nápoles en este mercado estival se complicaron las negociaciones con el Real Madrid. Esto coincidió con la eliminación del PSV en la previa de la Champions League, y la opción “Chucky” Lozano para los italianos recobró fuerza.
Las negociaciones de De Laurentiis con los holandeses no fueron fáciles, según La Gazzeta dello Sport el presidente del club italiano intentó rebajar los 42 millones de cláusula del azteca, pero el PSV se negó rotundamente y finalmente el Nápoles acabará pagando el montante total, convirtiéndose así en el fichaje más caro en la historia del conjunto italiano, superando a Higuaín (37 millones).
Lozano, además, pasará a tener una cláusula de rescisión de 130 millones de euros según SkySports.