Bagdad
Agencias
Al menos trece iraquíes murieron ayer y otros quince resultaron heridos en varios ataques perpetrados en diversas ciudades de Irak, informó a Efe una fuente de la Policía iraquí.
Cinco de los muertos se produjeron por la explosión de tres coches bomba en varios barrios de Kirkuk, ciudad ubicada a 250 kilómetros al norte de Bagdad.
La fuente añadió que esos ataques causaron también quince heridos y daños materiales en viviendas y vehículos que estaban cerca de los lugares de las explosiones.
Un grupo armado atacó un vehículo y asesinó a sus ocupantes, que eran el presidente y otros dos miembros del Consejo local de la localidad de Al Saadiya, 60 kilómetros al noreste de Baquba, capital de la provincia de Diyala, en el este de Irak.
Asimismo, otros hombres armados irrumpieron con armas con silenciador en la casa de un antiguo oficial del Ejército iraquí en la zona de Al Rashidiya, en el norte de la capital, asesinando al militar y a su mujer.
Un grupo de armados también asesinó con armas con silenciador al vigilante de una escuela y a una persona que le acompañaba en la ciudad de Al Sader, en el este de Bagdad.
La fuente agregó que el dueño de una librería fue asesinado por la explosión de una bomba lapa colocada en su vehículo en la zona de Al Iscan, en el oeste de la capital.
Un grupo de armados irrumpió en una escuela y ejecutó al director ante los profesores y alumnos en la zona de Al Yazira, al este de Tikrit, capital de la provincia de Salahedin, al norte de Bagdad.
Irak sufre un rebrote de la violencia sectaria y de los atentados terroristas, que causaron en 2013 la muerte de 8.868 personas, de las que 7.818 eran civiles, según cifras de la ONU.