Abiud Pérez Olán
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Un futuro incierto se cierne sobre MORENA, el Partido que hizo historia en este país, en su primera participación en una elección presidencial, ganó la disputada Presidencia de la República, el Congreso de la Unión, varios congresos de los Estados y tres gubernaturas, que lo pusieron en los cuernos de la luna, llevó por primera vez en la historia de México, al Presidente más votado con más de 30 millones de sufragios que nadie antes había obtenido en la lucha electoral que se dio el primero de julio de 2018, sin muchas virtudes, el partido de nueva creación se convirtió en el ganador, un triunfador que no tuvo cuestionamientos y que el triunfo se debió al liderazgo de quien encabezaba la propuesta para la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador fue el que impulsó y obtuvo en realidad, ese triunfo, no el partido literalmente.
En México hay quienes no entienden todavía que fue lo que sucedió el primero de julio de 2018 y se niegan a reconocer que López Obrador con su liderazgo construido a base de un discurso acusador y revolucionario que señalaba los errores del régimen priísta, logró las simpatías que hizo historia, mientras que las candidaturas que se disputaban para el primero de julio del 2018, “caminaron” sin ton, ni son, los mexicanos que asistieron a las urnas votaron por la propuesta de López Obrador, que lo mismo hubiera resultado si hubiera sido abanderado por el PAN, PRD y hasta por el PRI, lo de menos, eran las siglas, en 30 años de lucha el tabasqueño ya había consolidado una propuesta y en el tercer intento en la búsqueda de la Presidencia, lo logró, entiéndase bien, que la gente votó por López Obrador y MORENA era lo de menos.
Ahora vienen las elecciones intermedias en las que se renovará la cámara baja, algunas gubernaturas y congresos estatales, en esas elecciones el partido que hizo historia podría vivir un fuerte revés, en primer lugar, por las luchas intestinas que vive, los enfrentamientos de grupos y las advertencias del Presidente de la República de abandonar el partido si siguen los enfrentamientos y se vuelven corruptos, todo esto, no es cualquier cosa, es lo fundamental que deberían sopesar los dirigentes de MORENA para poder cohesionar un futuro que ya está a la vuelta de la esquina, la ambición está a flor de piel de los políticos que están en los puestos más encumbrados, cámara de diputados y cámara de senadores, los funcionarios públicos poco se meten en los asuntos políticos, aunque ganas no les faltan.
Lo que vimos la semana pasada del enfrentamiento entre el líder Morenista en la Cámara de Senadores, Ricardo Monreal y el ex presidente de la mesa directiva, Martí Batres, fue algo que nos muestra hasta dónde están los intereses desatados y al menos en estos casos, hacen a un lado la advertencia de Andrés Manuel López Obrador, en este asunto los que quisieron mostraron sus cartas, Yeidkol Polevsky, se fue del lado de Martí Batres, le dio la razón en los intereses que despertó Ricardo Monreal a favor de la tabasqueña Mónica Fernández Balboa, que al final de cuentas, se quedó como Presidenta de la mesa directiva, pero cuestionada y señalada de haber realizado un acto corrupto, como los que condena el presidente López Obrador, es aquí, donde se podría ver la congruencia del Presidente o simplemente es un discurso.
Se ofendió a Martí Batres con la decisión de hacerlo a un lado, simplemente por capricho o por no corresponder a los intereses de Ricardo Monreal, quien es un enfermo aspirante a sustituir a Andrés Manuel López Obrador en esa lucha por lo que viene, sin tomar en cuenta que para que vuelvan a obtener un triunfo como el del primero de julio del 2018, necesitan un liderazgo como el de López Obrador y ninguno de los políticos que lo acompañan en su gabinete, o en los poderes de la Federación, lo tienen, Martí Batres hizo lo correcto, se salió de la pelea y aunque Mónica se haya quedado con la mesa directiva, al final de cuentas será un triunfo pírrico y cuestionado, todo esto afecta a un partido que le falta directriz y consolidarse, a más de un año de su gesta heroica de triunfar en unas elecciones de tal forma que no ha mostrado madurez como partido, sigue siendo un movimiento, simplemente.
Grillos y grillas
Lo que se está viviendo en la Ciudad de México con MORENA, mucho tiene que ver en Tabasco, donde el Movimiento que de igual manera replicó el triunfo presidencial con el gubernamental que se llevó todo, salvo la presidencia municipal de los municipios más pobres de la entidad que ganó el PRD por un lado y el Verde en otro, se llevaron todo, pero a estas alturas, como partido MORENA no ha mostrado nada, no hay un dirigente consolidado, cualquiera mete su cuchara y se cree que puede realizar la misma hazaña del primero de julio del 2018, cosa que resultará de igual manera difícil y quienes se metan a luchar por candidaturas, se van a llevar una sorpresa, muchos si no es que todos de los que hoy ostentan cargos de alcaldes, diputados o funcionarios públicos, no lo obtuvieron por popularidad o preparación, simplemente se trató de la ola de popularidad de Andrés Manuel López Obrador que los llevó a donde están, lo peor es que no hacen nada por mejorar y ganarse la aceptación del pueblo, demasiada soberbia e ineficiencia, la corrupción en los 17 ayuntamientos de Tabasco, es espantosa y vergonzosa, alguien tiene que marcar un alto, si quieren competir en lo que viene… Nos leemos mañana.
