Abiud Pérez Olán
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Más que escandaloso, resulta preocupante la exoneración que un juez federal otorgó al señor Juan Vicente Hernández León, quien habría sido acusado por la Fiscalía como supuesto pederasta, luego de que se diera a conocer en las redes sociales en los primeros días del mes de abril del año pasado, un video filmado en el restaurante El Teapaneco de este municipio de Centro y que supuestamente ponía en evidencia este delito en contra de su menor hija, un hecho bastante contradictorio y con muchas aristas, que en la forma en que la institución procuradora de justicia lo manejó, enardeció a la sociedad y prácticamente el acusado fue linchado y sentenciado sin otro particular, que el dolor de una sociedad que se siente confundida y avasallada ante la falta de valores.

Ahora, un juez federal exonera a quien le fue dictado auto de formal prisión, luego de que la Fiscalía que preside el doctor Fernando Valenzuela Pernas exigiera al juez de la causa, formal prisión para el doctor Vicente Hernández León, a quien según la evidencia mostrada en el video, supuestamente tocaba a su hija, según el señalamiento de la Fiscalía y la perversa trabajadora de este restaurante de comida típica, pese a que estudiosos en la materia analizaron el video expuesto en las redes sociales y tomado como base por la Fiscalía, que no había tal delito, ni mucho menos el padre acusado tenía las intenciones lascivas, y por lo tanto, consideraban su inocencia.

La Fiscalía del Estado de Tabasco fue contundente y dura contra el padre de la niña a quienes la separaron del seno familiar y posteriormente ingresada a un centro de reclutamiento de menores del DIF, en donde pasó varios meses, en medio de la angustia de sus padres y familiares que intentaron por todas partes rescatar a la menor para darle no sólo el cuidado que necesitaba en esos momentos, sino también, la alimentación debida y desde luego, el amor familiar, luego de diversos intentos, de igual manera un juez federal, por medio de un amparo otorgó a los abuelos de la menor su custodia y es donde se encuentra actualmente, aunque seguramente con este resultado que se obtuvo en el amparo que concedió el juez, todo podría volver a la normalidad.

Un video filmado con perversidad en un restaurante que ha quedado marcado para la historia y en donde supuestamente sus empleados se dedican a espiar y a condenar la actividad de los comensales, como se mostró en este hecho, fue lo que detonó y sirvió a la Fiscalía del Estado para armar un escándalo que le dio la vuelta a la República Mexicana, sobre un hecho de pederastia, y que verdaderamente por la forma en que se planteaba, indignó, pero realmente ahora se puede concluir que todo fue una forma de entretener a la sociedad y la Fiscalía curarse en salud ante la ineptitud que sostiene en su lucha contra la criminalidad.

Según la orden del juez de distrito, se le concedió la protección de la justicia federal a Juan Vicente Hernández León, acusado por la Fiscalía tabasqueña, por el posible delito de pederastia, debido a la falta de pruebas, para que quede en libertad y se revoque la sentencia de formal prisión que el 15 de abril del 2016 habría emitido un juez local y así mismo, se llama al juez a que emita un nuevo auto, siguiendo los lineamientos de la sentencia del amparo 1268/2016 y quede en libertad el señor Vicente Hernández León, por falta de pruebas para procesar y desde luego, no queda ninguna reserva de ley.

Este hecho no debe quedar tan sólo en un escándalo mediático, donde se beneficiaron instituciones que necesitaban cubrir ineficiencias y un Tribunal Superior de Justicia que obedece órdenes y no cumple con el mandato constitucional de hacer respetar la ley de forma pronta y expedita, como debería ser y desde luego, a la trabajadora y al restaurante que propiciaron este escándalo que no sólo daño la vida y moral de una familia, sino que muestra a la sociedad hasta dónde podría llegar la injusticia de quienes tienen el poder para cubrir sus ineficiencias.

Este lamentable suceso que inició el 4 de abril con la publicación en las redes sociales del video y que pronto la Fiscalía del Estado y el Tribunal Superior de Justicia lo tomaron como suyos, aun con las explicaciones que los peritos exponían del video y los señalamientos de la familia del acusado, de ser un hombre de trabajo y comprometido con la sociedad, cometieron este grave hecho de injusticia que los marcará por siempre, el daño a la niña y al señor Vicente, así como a su esposa e hijos, no se reparará con el pago que seguramente tendrán que hacer en dinero efectivo por daño moral, cuando ya les destrozaron sus vidas.

La Fiscalía, el Poder Judicial y todo lo relacionado con la procuración de justicia en esta entidad, han cometido la peor canallada e injusticia en este hecho que a la luz de todos, fue tan sólo una perversidad de los empleados de un restaurante que ahora tendrán que responder por la vía civil, según se sabe por parte de los abogados que llevaron esta causa y desde luego, la victoria obtenida a través de la justicia federal.