Abiud Pérez Olán
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Es triste y penoso que en esta entidad, lo que empieza como un rumor, tarde que temprano se compruebe, y más aun cuando quedan dudas en esas acciones de la función pública en la que la sociedad está inmersa, la próxima semana la Secretaría de Comunicaciones y Trasportes, que preside el cuestionado Agustín Silva, dará a conocer el nuevo proyecto de transporte urbano de esta ciudad capital, aun sin esclarecer la muerte de uno de los directivos de la empresa Transbus y el enredo por la quema de más de 40 vehículos y el mal manejo de los recursos económicos, en donde tanto el desaparecido, Laires Carrera, como Rubén Salomé hicieron el escándalo y podría decirse propiciaron la quiebra de este empresa.
El sistema de transporte colectivo en esta ciudad capital, es una necesidad apremiante para la movilidad de las personas en todos sus ámbitos, pero el Estado ante la crisis económica y los malos resultados que se han tenido con el patrocinio a estas empresas de transportes, no puede seguir rescatándolas y subsidiándolas, el asunto del transbús, tiene que resolverse y no puede quedar en tan solo un escándalo todo lo que se ha dicho y señalado de esa empresa, cambiarle de nombre como lo sugiere el flamante secretario, es tratar de tapar todo lo que esa empresa carga sobre sus espaldas, corrupción, enfrentamientos y una gran división entre los socios que no permitió que la empresa Transbus creciera.
Es cierto que se necesita en este municipio capital, un servicio de transporte colectivo eficiente, de calidad y menos costoso para que la gente pueda accesarlo, que esta nueva propuesta de modernizar el transporte urbano, no sirva para enriquecer a los funcionarios públicos y de nueva cuenta entregarle el manejo a los directivos y concesionarios del transporte urbano, porque ya mostraron que no pueden y no se puede estar tirando dinero a la basura, ya se ha planteado en diversas ocasiones, que una de las formas de resolver el problema del transporte colectivo en esta capital, sería abrirlo para que los ciudadanos puedan incorporarse como empresarios a prestar el servicio y el Estado solamente sea vigilante y regule su funcionamiento, pero que la inversión sea totalmente privada, como pasa en otras entidades y ha sido resuelto el problema.
Agustín Silva anuncia que el nuevo modelo de transporte eliminará el cobro en efectivo y que será con unidades nuevas, que van a sustituir a las actuales del transbús, valdría la pena que expliquen quién será el proveedor, de qué manera se hará el concurso para la adquisición de las unidades y no pase lo mismo de siempre, que lo que menos interesa es darle un buen servicio a la ciudadanía, sino ganarse millones de pesos en la adquisición de las unidades, el negocio en la compra de autobuses, son dichos que no se han podido comprobar, pero que ex funcionarios han señalado que así lo acostumbran y ya tenemos como ejemplo, precisamente el fracasado Transbus, de los cuales, al parecer, lo dejaron caer y no repararon las unidades y hasta quemaron parte del parque vehicular, para tener un pretexto de adquirir nuevas unidades.
Al parecer, esta semana los capitalinos sabrán cómo será la propuesta del nuevo servicio de transporte colectivo, el nuevo modelo permitirá la modernización del transporte y con ello va implícito el rescate del Transbús, esto sería una protección a los ex directivos que fueron acusados de malos manejos y de propiciar la quema de los autobuses y en donde el seguro no reconoció, por haber sido un hecho premeditado, el transporte colectivo en el municipio de Centro, vuelve a ser tema de discusión y el secretario de Comunicaciones y Transportes, Agustín Silva debe explicar con claridad, principalmente, las adquisiciones de las nuevas unidades y el Estado que guardan las finanzas del Transbus, que no se cambie de nombre, para tapar las irregularidades.
Grillos y grillas
Aunque el nuevo delegado del Partido Revolucionario Institucional, Salomón Azar García no ha presidido ninguna reunión con los inquietos actores políticos en desbandada del tricolor, ya hay voces con exigencias y tal parece, que no aguantará tal presión, desde la ex diputada Lorena Bourregard, Adrián Hernández Balboa y algunos ex dirigentes del Comité Directivo Estatal, ejercen presión para que lo más pronto posible se dé a conocer la convocatoria que quiten de la presidencia que ostenta ilegalmente, Miguel Ángel Valdivia, el tricolor debe ser muy cuidadoso, porque al parecer, no le favorecen los tiempos, mucha desunión y el fracaso en el Congreso del Estado, donde perdieron dos legisladores, los pone en evidencia, desafortunadamente para este partido el nuevo delegado no tiene la calidad moral, ni está al tanto de lo que pasa en Tabasco, para poder llevar a cabo la renovación de la dirigencia, en donde los priístas puedan, de alguna manera, recomponer el rumbo y ese liderazgo solo se puede construir de una manera, escuchando las inquietudes y dando la oportunidad a quien sea el mejor, la pena que vive el tricolor, es que todos se creen con merecimientos y nadie da su brazo a torcer para encaminar una dirigencia que pueda enfrentar el 2018 con la oportunidad que tendrán de no ser gobierno, aunque el tiempo se acaba, tienen que actuar como una oposición responsable y no con payasadas, como lo hace Manuel Andrade Díaz… Nos leemos el lunes
