Abiud Pérez Olán
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Los ganaderos de Tabasco viven la peor crisis de su historia, desde hace una década la Unión Ganadera Regional de Tabasco entró en su peor momento, problemas como la falta de comercialización y el alto costo en los insumos, además de los subsidios que se fueron retirando, convirtieron a este sector productivo en lo menos rentable, en un Tabasco que se debate en una difícil situación económica, de ser un importantísimo sector que fue orgullo a nivel nacional, se convirtió en un grupo dependiente de los apoyos del gobierno.

La historia sobre la ganadería en Tabasco que fue orgullo por muchas décadas de la entidad, prácticamente destaca desde el gobierno de Tomás Garrido Canabal, hasta Enrique González Pedro, cuando recibieron un apoyo total que se supo invertir y enriqueció la vida ganadera de Tabasco que no sólo vendió carne en canal a la Ciudad de México, sino que hasta en el norte del país se hizo famosa la ganadería tabasqueña, la visión de dirigentes como don Natividad Palacios y Arcadio León Estrada, que supieron de alguna manera explotar los apoyos gubernamentales, hizo de la ganadería un ejemplo, que posteriormente decayó y se convirtió en lo que hoy todos conocemos.

No tan sólo durante el gobierno de Arturo Núñez los ganaderos recibieron apoyos económicos, sino también durante otras administraciones, pero en esta que hoy nos ocupa, por el préstamo de los 30 millones de pesos que indebidamente realizó el gobierno del Estado y que ha llevado a la cárcel a uno de sus dirigentes, Baltazar Sánchez, debería de tener también en los separos esperando la decisión de un juez, a funcionarios públicos que seguramente acataron las instrucciones del gobernador Arturo Núñez y que en este caso, Pedro Jiménez León sería la persona que a nivel gobierno debe responder por este ilícito que por la vía penal ha llevado al primer funcionario de la Unión Regional Ganadera, a su detención.

La Unión Regional Ganadera recibió de parte del gobierno del Estado un empréstito de 30 millones de pesos que se negó a pagar, pese a los llamados del gobierno para que cumplieran la devolución de los recursos otorgados para realizar obras sociales que impulsaran el desarrollo de esa industria ganadera y que según el juicio que se lleva a cabo, por la vía penal, se utilizó para pagar deudas anteriores al préstamo y otro tipo de desvíos que no se contempla en el contrato del préstamo y en donde se señala como responsable, a los dirigentes que recibieron este dinero, sin embargo es al dirigente actual a quien se le fincó responsabilidad y ya está detenido; sería injusto que una sola persona pague por el daño causado al erario público, cuando son señalados otros personajes relacionados con el gobierno anterior.

El desvío de la Unión Regional Ganadera de Tabasco, de los 30 millones de pesos que el gobierno prestó para pagar los proyectos productivos que serían el destino del crédito, es la demanda principal de este juicio que del tipo mercantil, pasó a penal, por causas de un señalamiento de fraude, en donde la corrupción entre funcionarios de la Unión Regional Ganadera y servidores públicos será el desenlace que tenga, cuando este jueves al señor Baltazar Sánchez se le dicte el auto de vinculación a proceso y se manifieste a los otros involucrados, entre los funcionarios que entregaron este crédito.

Este organismo carece de recursos para sufragar lo requerido por el gobierno del Estado, que en este caso, son 53 millones de pesos, por los intereses que han devengado a la fecha, los 30 millones de pesos otorgados, con este lamentable caso, la desaparición de la Unión Regional Ganadera, está en puerta y con ello el golpe a los pocos ganaderos que tiene Tabasco, que cada día ven más difícil la comercialización de su ganado, por la falta de un organismo rector que comercialice el poco ganado que queda en Tabasco, este acto que cometieron los dirigentes de la Unión Regional Ganadera, en contubernio con los ex funcionarios de gobierno, debe ser sancionado y resarcirse el daño al gobierno de Tabasco y el gobierno buscar e impulsar una organización ganadera administrada por hombres y mujeres de experiencia que no sólo busquen sangrar este organismo, como siempre lo han hecho.

Grillos y grillas
Si realmente se quiere recomponer las cosas en Tabasco, como se está haciendo con la Unión Regional Ganadera, donde se había cometido un presunto fraude entre ex dirigentes de ese organismos y ex funcionarios públicos, los desvíos del Fideicomiso para el fomento y desarrollo de las empresas en el Estado de Tabasco, tiene que tener una resolución similar al asunto de los ganaderos para que todos aquellos que recibieron el dinero como préstamo para impulsar a la empresa tabasqueña, lo justifiquen y devuelvan, son 259 millones de pesos que el Comité Técnico de tal fideicomiso entregó durante el gobierno de Arturo Núñez Jiménez y la gran mayoría de ellos no tienen justificación, ni en la inversión, ni en los resultados, por lo tanto, se tiene que llamar a cuentas a todos aquellos que recibieron el recurso y quienes lo otorgaron, el dinero de los tabasqueños no se puede ir al caño de la coladera, porque si queremos que Tabasco retome un mejor rumbo, hay que actuar en forma enérgica en contra de quienes abusaron y repartieron el dinero público a sus anchas, y el FIDET, es un ejemplo también de corrupción y componendas… Nos leemos mañana.