Carbajal desearía que otro mexicano engrosara la lista de los cinco copas. En el último partido de este 2016 de México ante Panamá, vio a Rafael Márquez con serias posibilidades de hacerlo

Ciudad de México
Agencias
Todo futbolista comienza con titubeos en busca de llegar a su primera Copa del Mundo, en donde el sueño podría quedar ahí.
Entonces surgen jugadores diferentes, con una capacidad de resistencia única para andar de Mundial en Mundial.
Hay tres que se cotizan por participar en cinco, nadie más en el orbe. Uno es mexicano, Antonio “La Tota” Carbajal, otro alemán, Lothar Matthäus y un italiano, Gianluigi Buffon, quienes apoyan la trayectoria de Rafael Márquez para que los alcance en esa cita que viene persiguiendo el zamorano.
Los años no pasan en balde”, dice Carbajal desde su vidriería en León, Guanajuato, “es más lento con los años, pero ha ganado experiencia. ¡Qué bueno que vaya por cinco Mundiales! lo veo muy bien físicamente”.
Y es que eran otros tiempos en el futbol. Carbajal contabilizó Mundiales desde 1950 a 1966 en donde el régimen de cualquier jugador era muy distinto al de ahora. “Yo vivía en casa de huéspedes, a veces comía bien, la mayoría de veces mal, así era en esos tiempos. Me gustaba ir con la Selección, porque comíamos tres veces al día. Hoy es distinto, Márquez debe cuidar todo lo que come por salud, no por carencia”.
Lothar Matthäus es el otro grande de la estadística mundial. Después de quemar competencias y etapas, sumó su quinta Copa del Mundo en 1998, la primera había sido en España 1982. En ese trayecto, eliminó dos veces al Tri en octavos de final.
Es muy difícil. Sólo Carbajal y yo lo hemos conseguido, pero eran otros tiempos. La Tota vivió una época más lenta y yo una más peligrosa; los contactos físicos eran muy duros. Ahora se protege más al futbolista talentoso”, mencionó.
Cuando se encontraron de frente en el Salón de la Fama de Pachuca, la Tota Carbajal y Lothar Matthaüs hablaron de su récord. “Me dijo que ya me había alcanzado”, recuerda el exarquero mexicano, “y me dio gusto, se lo dije sinceramente. Qué bueno que lo había hecho, sin embargo, yo lo hice primero”.
Rafael Márquez jugó su primera Copa del Mundo en Corea-Japón 2002, entonces era un joven de 23 años que pedía paso entre la élite, ya siendo el capitán de la Selección Mexicana.
Estuvo en Alemania 2006, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014 anotando gol en cada edición, y en la víspera de Rusia parece que su lugar es intocable en el equipo de Juan Carlos Osorio..