Y parece que así inició (tiempo estimado de lectura: 6 minutos)

“La esencia misma del instinto es que sigue independiente de la razón.” Charles Darwin

Elisabeth Casanova García
afgha@hotmail.com
Jorge Quiroz Valiente
917 1067165
A lo largo de la historia, la agricultura ha proporcionado la base para el desarrollo y el avance humanos, y sus orígenes y difusión son aspectos fundamentales del debate actual sobre la biodiversidad y el uso de la genética para mejorar la agricultura. Actualmente, la industrialización de las técnicas agrícolas y la simplificación de la tenencia de la tierra amenazan la biodiversidad de los cultivos y solo algunos cereales (trigo, arroz y maíz) representan 50% del consumo mundial. Si queremos abordar las preocupaciones actuales sobre la biodiversidad vegetal, debemos considerar todos los cultivos del mundo, incluidos los reservorios agrícolas no industrializados en los países menos desarrollados.

Aquí no hay hallazgos definitivos o evidencia demostrable que nos permitan determinar exactamente cuándo comenzó la agricultura, cualquier intento de indicar el momento preciso de su ocurrencia solo daría una falsa impresión de la duración del proceso. Los recolectores aún existen, practicando formas simples de cultivo y domesticación, y en tiempos prehistóricos se cree que hubo largos períodos de superposición entre las actividades de caza y recolección.

Las técnicas modernas de mapeo genético indican que la agricultura comenzó en el Medio Oriente, particularmente con respecto al mejoramiento de cereales, otros estudiosos, utilizando las mismas técnicas, han concluido que el cultivo del arroz se originó en varios centros del Este (China). Los marcadores genéticos muestran que en los últimos 10,000 años las plantas cultivadas no han sido modificadas, proporcionando límites de tiempo para la domesticación similares a los establecidos por los estudios arqueológicos.

La agricultura debe haber dependido de toda una serie de descubrimientos y la comprensión de las técnicas. La primera hipótesis de las últimas décadas sugiere que todos los aspectos de la civilización se originaron en el Medio Oriente y posteriormente difundidos por migraciones.

Entre 20-30 mil años atrás, todo indica que las mujeres de distintos lugares del mundo —responsables en esos entonces de la recolección de alimentos— comenzaron a cuidar y después a sembrar plantas silvestres que eran de interés para la alimentación/medicina, o para la obtención de madera y fibras, para luego seleccionar semillas de las mejores plantas e iniciar así el camino de la domesticación. Hace 10-12 mil años, las mujeres ya cultivaban plantas domesticadas en al menos cuatro regiones del mundo: el llamado Creciente Fértil (donde hoy es Irán, Irak, Siria, Palestina, Israel, Egipto, Líbano y Turquía), China, Nueva Guinea y Mesoamérica (México y Centroamérica). Unos 2-4 mil años más tarde, las mujeres ya habían domesticado cultivos alrededor del mundo, y se destacaban 8 regiones más: Sahel Africano, Etiopía, África Occidental, Sur de Asia (principalmente India), Sudeste Asiático, Sudeste de Norte América, los Andes Centrales (Perú, Bolivia, Ecuador y Norte de Chile y Argentina) y Amazonía (Colombia, Brasil, Ecuador y Perú).

Así, por ejemplo, el trigo fue domesticado de manera paralela en distintos lugares del Creciente Fértil; el frijol (poroto o fréjol) y el tomate fueron domesticados tanto en Mesoamérica como en los Andes centrales; el cerdo habría sido domesticado independientemente en Nueva Guinea y en China. Un caso aún más diverso es el del ñame (cultivo importante en Asia y África), que habría sido domesticado en regiones de África, Centro y Sudamérica, Sur y Sudeste asiático, Polinesia, Melanesia, Australia.

Pocos cultivos habrían sido domesticados en un sólo lugar y que de allí diseminadose al resto del mundo. Al parecer, la lechuga sería uno: domesticada en algún lugar del Medio Oriente, y desde allí hacia Europa primero, Asia después y finalmente América.

La domesticación de animales fue semejante, siendo primero el perro; llevada a cabo de manera independiente en múltiples regiones de Asia, Europa, África y América, en todos los casos a partir del lobo. Había perros 14 mil años atrás y se cree que su domesticación fue iniciada hace 35 mil años. Las cabras, cerdos y ovejas ya estaban presentes hace 10-12 mil años en Asia y África, y hace 8-10 mil años había crianza de vacas y gallinas.

Una situación distinta se produjo en América, donde los animales domesticados —llamas, alpacas, cuyes, posiblemente gallinas— estuvieron presentes sólo desde hace 6 mil años; es posible que haya sido así por la abundancia de animales medianos/pequeños, de baja agresividad y relativamente fáciles de cazar (ciervos, guanacos, vicuña, tapir, aves, etc.). Nuevamente hay indicadores de que las mujeres fueron las principales domesticadoras.