Agrotendencias
El Uspí, tan desconocido como delicioso (tiempo estimado de lectura: 6 minutos) “Rodeado de pachulí, estará mi jacalito, para perfumarte a tí, cuando vivamos juntitos. En la milpa encontrarás, chile amashito y chipilín, y también frijol de vara y unas matas de chinín. He sembrado perejil, jondura, nance y marañón, anona y cuinijicuil. También uspí […]
25 de julio de 2021

El Uspí, tan desconocido como delicioso (tiempo estimado de lectura: 6 minutos)

“Rodeado de pachulí, estará mi jacalito, para perfumarte a tí, cuando vivamos juntitos. En la milpa encontrarás, chile amashito y chipilín, y también frijol de vara y unas matas de chinín. He sembrado perejil, jondura, nance y marañón, anona y cuinijicuil. También uspí y melocotón” Canción popular tabasqueña

Elisabeth Casanova García
afgha@hotmail.com
Jorge Quiroz Valiente
917 1067165
Grandes áreas de bosque tropical ahora se están perdiendo debido al desorden en la ocupación de superficies para la producción de alimentos y, por otro lado, los fragmentos de bosque restantes pierden biodiversidad debido a extinciones aleatoria de recursos locales. Al mismo tiempo, decenas de miles de hectáreas de tierras se abandonan anualmente a la sucesión forestal. La vegetación secundaria, derivada de la sucesión temprana después de la agricultura o ganadería, es muy lenta, y las semillas de árboles y arbustos que llegan por sí solas son las pioneras en la sucesión. Estas plantaciones tempranas, una o muy pocas especies, casi todas dispersadas por el viento, detiene la erosión y ayuda a retener nutrientes y agua. Sin embargo, estas comunidades de plantas de baja diversidad no se parecen a la selva anterior durante muchos años, si es que alguna vez lo hacen.

La planta Couepia polyandra, presenta una distribución neotropical, abarcando la mayor parte de Mesoamérica y Costa Rica, actualmente está en peligro de extinción. Es originaria de México y se distribuye en la vertiente del pacífico desde el sur de Sinaloa, Nayarit, Jalisco, Colima, Michoacán, Guerrero, al noreste de Puebla, Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Tabasco, e introducido en la Península de Yucatán. El árbol de Couepia polyandra es conocido en la península de Yucatán y el estado de Tabasco. Los nombres con los que conoce son Uspí, Carnero, Fraile, Palo de Fraile, Guayabillo de unía, Guayo, Olopillo, Zapote amarillo, Zapotillo etc.

Se encuentra a diferentes altitudes, que van de 0 a 600 m, así como asociadas a diferentes tipos de vegetación, tales como selvas medianas subperennifolias hasta selvas bajas caducifolias.

Es un árbol con fuste irregular que mide de 6 a 30 m de alto, con un diámetro a la altura del pecho (DAP) hasta de 40 cm. La corteza externa es lisa a ligeramente escamosa, de color verde grisáceo y la corteza interna es de color café rojizo intenso. El fruto es una drupa elipsoide de 40-45 x 20-25 mm, carnosa y cáscara delgada. La fruta se come fresca cuando madura. Cuando se corta madura del árbol no se lastima. Es muy resistente y tiene un hueso duro en el centro, su sabor es dulce, su pulpa fibrosa y seca. Se cosecha cuando está sazón y se deja madurar en la casa.

El árbol de Juspi o Uspí tiene importancia por sus diversos usos como fruto comestible de auto abasto y venta, medicina tradicional como anticonceptivo (Biblioteca Digital de la Medicina

Tradicional Mexicana, 2009), en la agroindustria, para la elaboración de velas y jabones, árbol para sombra y leña. Ante esto, se le considera como una variedad útil, tiene una fruta marginada entrando a la pérdida de germoplasma con un riesgo extremo de la extinción, lo cual implica una disminución en la capacidad de producción y de mejoramiento genético. Cabe señalar el Juspi o Uspí es un elemento florístico del sureste de México, cultivado de manera aislada en los huertos familiares además de ser considerado subutilizado porque su mercado es local y no se ha desarrollado un cultivo para un mercado amplio. Sin embargo, son escasos los estudios de esta especie en México. En este sentido, se ha reportado una buena germinación de las semillas con valores de 60 a 98%.

Actualmente es poca la información agronómica generada sobre C. polyandra, por lo que se carece de la tecnología básica para la implementación de planes estratégicos de rescate y multiplicación de la especie. Se sabe que posee potenciales antiinflamatorias, anti-osteoartríticos, anti-radicales libres, anti-mutagénicos y anti-diabéticas.

Para describir un poco la experiencia de comer frutos maduros de uspí, habría que apelar a muchas sensaciones, ya que contrario a la mayoría de los frutos tropicales, no es un fruto jugoso, es seco y pastoso que recuerda a un camote cocido, su color es amarillo hasta tonos anaranjados y su sabor sí es un cocktail tropical, ya que evoca al mango maduro, papaya, nance, pero sin notas ácidas y que junto con su consistencia inesperada resulta explosivo a los canales perceptivos, no queda más que probarlo!

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