¡Disfrutemos de una lectura con café!
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“Entre los muchos lujos de la mesa, el café puede ser considerado como uno de los más valiosos. Él atisba la alegría sin intoxicación y el placentero flujo de espíritus que ocasiona nunca es seguido de tristeza, languidez o debilidad”. Benjamín Franklin

Elisabeth Casanova García
afgha@hotmail.com
Jorge Quiroz Valiente
jorgequirozvaliente@hotmail.com
Diferentes culturas descubrieron que masticar semillas, cortezas u hojas de ciertas plantas que contienen cafeína tiene el efecto de aliviar la fatiga, aumentar la conciencia y mejorar el estado de ánimo. La cafeína es un compuesto orgánico que se conoce como alcaloide y está presente en casi 100 especies en 13 órdenes del reino vegetal. Aunque las especies de Café son la fuente principal, también se encuentra abundantemente en la planta de té, mate, hoja de coca y hojas de Café, en semillas de cacao y guaraná. Comercialmente, se encuentra en varias bebidas no alcohólicas, polvos, cápsulas y en fármacos.

El contenido de cafeína en la infusión de café está estrechamente relacionado con sus propiedades estimulantes y su sabor amargo. El contenido final de cafeína ingerido por los bebedores de café depende del contenido de las semillas, incluida la composición de la mezcla, que depende a su vez, de la genética, el grado de maduración y el método utilizado para prepararlo. En un estudio se analizó el contenido de cafeína en 20 cafés diferentes, comprados en cafeterías de los Estados Unidos y la cantidad de cafeína en las bebidas osciló entre 32 y 47 mg/100 ml. También se observó que el contenido de cafeína en el mismo tipo de café comprado en la misma tienda en seis ocasiones distintas osciló entre 54 y 118 mg/100 ml).

Aproximadamente el 80% de la población mundial consume algún producto con cafeína diario; principalmente por sus efectos estimulantes, lo que la convierte en la sustancia psicoactiva más consumida en el mundo. En los últimos 50 años, el consumo mundial de café se ha incrementado 1.9% anualmente. La Unión Europea tiene el 28% del consumo mundial total, pero EE.UU. es el primer país consumidor, con el 16%, seguido de Brasil, con el 13%. México aporta alrededor del 1.5% del consumo mundial total.

El café es el principal contribuyente a la ingesta de cafeína en la mayoría de los países del mundo. Se producen excepciones en áreas específicas, como regiones de América del Sur, Irlanda y el Reino Unido, China, India y otros países asiáticos, donde otras bebidas, como hojas de yerba mate, bebida de guaraná natural y los tés negro/verde, se consumen típicamente.

México es el 11º productor mundial de café. La producción de sus cafetos representa el 2.4% del total mundial. Del total de exportaciones mexicanas de café, 53.85% se destina a Estados Unidos; el volumen restante, a países miembros del bloque de la Unión Europea y otros como Japón, Cuba y Canadá. La producción de café emplea a más de 500 mil productores. Chiapas es el principal

productor (42%), seguido por Veracruz (24.0%) y Puebla (15.3%); el café representa el 0.66% del PIB agrícola nacional y el 1.34% de la producción de bienes agroindustriales.

La cafeína participa en varios efectos biológicos en el cuerpo humano, la mayoría de ellos relacionados con mejoras en las funciones del cerebro y del sistema nervioso central (SNC). Varios estudios epidemiológicos asocian el consumo moderado de café con la reducción del riesgo a enfermedades crónico-degenerativas y muerte. Además, la cafeína ejerce un efecto positivo en el ejercicio, ya que el rendimiento mejora significativamente, ya sea evitando la fatiga, mejorando el suministro de sustratos o mejorando la absorción de oxígeno. Aún existen controversias con respecto a los beneficios y riesgos de la cafeína, pero se dispone de evidencia confiable que respalda su potencial de promoción de la salud cuando se consumen cantidades moderadas. ¡A consumir café mexicano!