¿c ó m o?
Heberto Taracena Ruiz
(Larga es la noche que jamás
encuentra el día. Shakespeare-Macbeth)
I
En el reposo,
los pensamientos bullen
como alas,
en ciernes,
de gavilán:
flotantes,
separadas
del cuerpo que a su vez
vaga en la cabecera
cuando en vilo oscilamos.
Paredes domésticas
hacen las veces
de refugio:
como la forma corporal
es casa
de pensamientos
sutiles.
Pero estos, incesantes,
rebasan las fronteras.
Bullen como burbujas
ondulantes.
En duermevela,
apenas si dialogan
pensamientos y cuerpo.
La noche es larga,
nerviosa,
cuando a solas estamos.
II
Por la mañana,
los ojos entreabiertos
desobedecen.
Pensamientos regresan,
pero no son iguales.
Así, ellos,
como el cuerpo,
denotan deterioro
que el día no compensa.
¿Cómo hacer del reposo
guarida real
de los pensamientos?
¿Cómo?
Cunduacán, Tab., a 21 de marzo de 2020