Una capital fracturada

Humberto Iduarte
humbertoiduarte49@gmail.com
Hace apenas unos días, comentaba que pasaría si el segundo puente en Tabasco 2000 no se entregaba en tiempo y forma por el caos vial que provocaría, para mala suerte del ciudadano de esta ciudad, esto fue así.

El regreso a clases, sin la totalidad de las escuelas todavía, la mala organización de la planeación de la obra, la falta de iniciativa para solicitar apoyo a la dependencia correspondiente de movilidad, la pésima organización interna de hacer una obra más sobre otra en la misma zona hizo que el caos vial fuera desastroso.

Conocimos hace unos días la advertencia del ayuntamiento a la empresa constructora la cual sería sancionada si no entregaba el pasado viernes la obra, cosa que incumplió, sin embargo, a pesar de ello no hay fecha todavía de entrega, ni sanción hecha.

También dimos a conocer que el puente al que nos referimos no había la cantidad suficientes de obreros y que incluso, pareciera ser que, en la construcción de una sola casa, se podía contar con una mayor cantidad de obreros que en esa obra. Llegamos a contar a no más de 9 personas solamente, y sin maquinaria pesada en algunas ocasiones.

Hay que decirlo con todas sus letras. De ese tamaño fue la irresponsabilidad, tanto de la empresa constructora, como la del propio ayuntamiento.

Nunca, a pesar de la urgencia de hacerla con rapidez por lo que esta representaba por las molestias causadas, se consideró los tiempos perdidos en la misma.

Los sábados se trabajaba hasta el mediodía y de ahí, hasta el lunes. Nunca hubo labores extraordinarias o nocturnas. De ese tamaño la dejadez y la mentalidad de rancho de esta autoridad.

Pero lo que no se entiende aún, es cual haya sido la causa del retraso de la entrega de la obra, porque una autoridad que está pagando a tiempo el anticipo, las estimaciones, la revisión del avance de la obra, y que a pesar de ello no se haya dado cuenta del desfase del avance de la misma, merece no solo una crítica severa por su insolvencia moral y de capacidad sino también los miles de recordatorios, que como bien dijera el propio alcalde se le vendrían encima. Ya los tiene.

En fin, no se entiende la razón de lo anterior en el mejor de los casos, pero si se puede comprender que cuando una obra designada está sujeta a “moches” o a “diezmos” puede darse el caso que a la empresa no se le pueda exigir con severidad , y eso se comprende, se entiende, aunque esto sea grave por el daño a la comuna, lo demás les vale una sombrilla.

El edil tiene que dejar de hacer las cosas a como acostumbraba, debido a que en este nuevo régimen, todo mundo está más que pendiente de la forma de trabajar de cada uno de ellos, y todo por el compromiso que el presidente Andrés Manuel López Obrador hizo con la sociedad entera.

Solo hay que recordarles que, en estos nuevos tiempos, La ciudadanía no tiene porque pagar los platos rotos causado por la ineficiencia que existe en este y otros ayuntamientos.

Un ayuntamiento -en minúsculas intencionalmente- cuya dirección es tan mala, que el propio cabildo está fracturado en dos partes por las controversias que se han ido dando por el desacuerdo que se tiene con el edil.

Los intereses del alcalde se ponen en la vitrina publica con este escándalo y la gente, o sea, el ciudadano común, lo está comenzando a interpretar que tiene en la persona de Evaristo Hernández a una autoridad sumamente autoritaria y caprichosa.

Hoy es jueves de la mesa política “La Quinta Columna”. La cita es a las 7 de la noche por las plataformas digitales de Facebook/La Agenda en Red o bien, por YouTube/Humberto Iduarte.

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