Los asistentes podrán disfrutar durante la jornada inaugural de una salsa preparada en un molcajete gigante
México, DF
Notimex
El Centro Comunitario Ex Convento de Culhuacán albergará el Tercer Festival de chiles, salsas y molcajetes, del 27 al 31 de mayo, con la finalidad de preservar esta tradición culinaria.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) informó que este festival se realiza en coordinación con el patronato de la Feria de la enchilada, en el que habrá muestra de chiles y molcajetes, talleres gastronómicos, conferencias, artesanías, eventos culturales y musicales.
Además, los asistentes podrán disfrutar durante la jornada inaugural de una salsa preparada en un molcajete gigante.
De acuerdo con Ana María Velasco Lozano, etnohistoriadora del INAH, el chile es de origen americano y no se encontraba más que en México y la zona andina.
Recordó que los biólogos que lo han estudiado genéticamente afirman que nació en el centro de Bolivia, «sin embargo, el Capsicum annuum, que es el que actualmente se consume, proviene del Amazonas y de ahí salió al mar por medio de las aves que son portadoras de las semillas».
También explicó que este fruto picante era usado como condimento, estimulante, medicina y como castigo en la época prehispánica, como se registra en el Códice Mendocino, donde aparece un padre castigando a su hijo dándole a oler el humo de varios chiles que están al fuego.
Otra muestra se encuentra en el Códice Florentino, en la representación de la fiesta mexica Huey Tozoztli dedicada a la diosa Chicomecóatl, se aprecian dos mazorcas de maíz y tres personas cargando cajas de petate con ofrendas, una de ellas con chiles.
La investigadora, cuya tesis de maestría fue «Recursos alimenticios de la Cuenca de México», señaló que las primeras semillas cultivadas datan de hace más o menos siete mil años y fueron encontradas en cuevas de Tehuacán, Puebla.
Mientras la arqueóloga Rosa María Reina y el biólogo Lauro González Quintero encontraron en Cuautitlán silos con simiente de esta planta, que data de hace dos mil 950 años.
Este fruto indispensable en el sistema alimentario mexicano junto con el maíz, el frijol, el amaranto, la chía, la calabaza y algunos agaves, es usado como especia e ingrediente para dar sabor a la comida, puntualizó Velasco Lozano.
