Tercetos para Agenor
Heberto Taracena Ruiz El lenguaje de Agenor ha rubricado la muerte y vive el Declamador. La parca lleva al esteta en su embalaje copioso y la secunda el Poeta. Y sin temores ni rito, por avenencia tomada, va y dicta el Jurisperito. Es con pétalos de acero como la muerte le pide, Agenor, ser Consejero. […]
17 de abril de 2017

Heberto Taracena Ruiz

El lenguaje de Agenor
ha rubricado la muerte
y vive el Declamador.

La parca lleva al esteta
en su embalaje copioso
y la secunda el Poeta.

Y sin temores ni rito,
por avenencia tomada,
va y dicta el Jurisperito.

Es con pétalos de acero
como la muerte le pide,
Agenor, ser Consejero.

Nadie sale lastimado
porque Agenor de por vida
y en la muerte es valorado.

Ha cumplido en este tiro
y acertó sin titubear
en el último suspiro.

Declamador y Poeta
Jurisperito y mentor,
Agenor, todo una meta.

El, con Soneto en la mano,
y Gaba Crónica haciendo:
los dos, hermana y hermano.

Porque la palabra hermano
entrambos se hizo común:
se retoman de la mano.

Y de esa palabra hicieron
una pieza inextinguible
que por todos compartieron.

Agenor, tus sentimientos,
al balance de la muerte,
laten en cada momento.

Gracias, Agenor, por darnos
tal diversidad de esencias,
y gracias…¡por esperarnos!
Escrito en el rancho San Pedrito, el 12 de abril de 2017. Cunduacán, Tab. Agenor González Valencia, nace el 26 de febrero de 1932, en Villahermosa, Tabasco. Muere a las 4 de la madrugada el 12 de abril de 2017.

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