Tacotalpa
Roberto Flores
Corresponsal
A ocho días de que el alcalde de Tacotalpa protagonizara un accidente en el cual presuntamente conducía en estado de ebriedad, todo sigue en hermetismo, pues ni tránsito municipal ni el director de seguridad pública dicen algo al respecto.                                  Sin embargo, ciudadanos que presenciaron el accidente en el cual el protagonista fue el presidente municipal Alterio Ramos Pérez, señalaron que eran aproximadamente las 10; 30  de la noche cuando un fuerte estruendo despertó a los colonos de Ceibita Primera, lugar donde el susodicho se salió de la carretera al pestañearse por las condiciones en que conducía (estado de ebriedad ya que a dichos de la gente venía de una francachela ) una camioneta propiedad del H. Ayuntamiento la cual quedo hecha pedazos al salirse de la carretera y estrellarse de frente con grandes escombros que habían. Debido al estrellón contra los escombros y a las condisiones en que se en centraba el alcalde momentáneamente quedo atontado por lo que no atinaba a salir de la camioneta que hasta las llantas se le explotaron.
Al escuchar el estruendoso choque de la camioneta contra los escombros los lugareños salieron y se dieron con el espectáculo de que era el presidente municipal de Tacotalpa, el cual a dichos de la gente se notaba alcoholizado por lo que algunos de ellos lo auxiliaron, y trataron de sacar la camioneta cosa que no lograron.
Mientras tanto algunas personas para no perderse el espectáculo tomaban fotografías y videos al ebrio alcalde para después exhibirlo en las condiciones en que andaba, hasta que un sujeto de nombre Jorge Pérez más conocido como el piojo amenazo a los que tomaban fotos y videos, para posteriormente sacar del lugar a su patrón en una motocicleta dejando abandonada la camioneta. Al lugar del accidente llegaron elementos de Seguridad Pública y de Tránsito quienes posteriormente se ocuparon de sacar la camioneta y desaparecerla para borrar huellas y señales del accidente, y que hasta la fecha nada se sabe ya que de alguna manera protegen al alcalde que a dichos de la gente andaba bien briago.